EL Consejo de Hermandades y Cofradías de Cádiz ha confirmado la celebración de una Procesión Magna Mariana en 2017, después de la autorización del obispo, Rafael Zornoza. Era un rumor a voces que el Consejo quería organizar algo especial en un año de efemérides diversas, que se podían aplicar al caso que nos ocupa; como lo era que había algunas reticencias en el Obispado. Y no por hostilidad, ni por fastidiar, sino porque no entendían del todo los motivos. A pesar de estar reciente otra Magna Mariana de la diócesis: la del pasado agosto en Chiclana.

Sin embargo, la propuesta presentada por el Consejo es coherente. Vincular una procesión magna con el Tricentenario de la Casa de la Contratación hubiera sido bastante raro. Vincularla al 750 aniversario de la diócesis tenía más sentido, pero podría dar un toque demasiado capillita a esa conmemoración. Sin embargo, vincularla a las celebraciones de la Virgen del Rosario en 2017 es incontestable. Porque se trata de la Patrona  de Cádiz y de sus cofradías.

El 7 es el número simbólico de la Virgen del Rosario. Su fiesta se celebra el día 7 de octubre, fue nombrada Patrona de Cádiz en 1867, coronada canónicamente en 1947, proclamada Patrona del Consejo de Cofradías en 1957 y nombrada Alcaldesa perpetua en 1967. Así que estas coincidencias, a conmemorar en 2017, justifican que sea como un Año Santo del Rosario para que aglutine las devociones marianas de la ciudad.

Será difícil organizar esa Magna Mariana si no hay implicación general básica. La anterior procesión de esas características tuvo lugar en 2005, en tiempos de Rafael Corbacho, y fue elogiada. Por el contrario, el último intento no salió tan bien. Me refiero al Rosario del Año de la Fe, organizado en mayo de 2013. Estaba previsto con 21 imágenes, pero finalmente participaron cinco: la Virgen de los Desamparados de la Castrense, la Milagrosa de San Vicente de Paúl, Angustias de la cofradía del Caminito, la Asunción de San Francisco y la Virgen del Rosario, Patrona de Cádiz. Faltó colaboración.

En los últimos tiempos hay una fiebre de eventos cofradieros en Andalucía. Algunos dicen que es la Andalusian Soul del turismo cofrade. Ha aumentado desde que se reúnen Martín José y los demás presidentes andaluces. Estas procesiones no se organizan para el lucro de la hostelería. Aunque una salida como la del Señor del Gran Poder este fin de semana en Sevilla (con 200 autobuses) genera beneficios indirectos. Estos actos se hacen para aumentar la devoción religiosa, o no se hacen. La Magna Mariana de 2017 en Cádiz obligará a una preparación consecuente y con fundamentos.

José Joaquín León