EN este país no nos ponemos de acuerdo para nada, excepto para cargarnos la reválida de la Lomce. Salieron los chavales a la calle a manifestarse con Teresa Rodríguez la de Podemos; y, al día siguiente, tras pedírselo el portavoz del PSOE, Antonio Hernando, el candidato virtualmente investido, Mariano Rajoy, le ofreció la reválida difunta en bandeja. Por otra parte, ya se sabía, puesto que lo había pactado con Ciudadanos. ¿Hay buen rollito o no? Nunca se vio cosa igual.

Por el contrario, con la hora no nos ponemos de acuerdo. Mañana se retrasan los relojes. En Baleares, donde gobierna Francina Armengol (que es una baronesa pedrista del PSOE), han pedido no retrasar la hora. Y en la Comunidad Valenciana, donde gobierna otro barón del PSOE, Ximo Puig (que un día va con unos y otros depende), han pedido lo mismo. A pesar de que la medida está impuesta por Europa, a través de una directiva de obligado cumplimiento.

Existe otro problema, que es la geografía. Baleares es la primera comunidad de España en la que sale y se pone el sol (en otras informaciones he leído: “la primera en la que sale y la última en la que se pone”, lo cual es un disparate para la cárcel de papel de La Codorniz). Por eso, no quieren una hora menos, sino más. Sería una barbaridad que en la radio dijeran: “Son las 10, una hora más en Baleares y en la Comunidad Valenciana y una hora menos en Canarias”. ¿Y en Cádiz, qué pasa? Estamos por medio.

Para que nadie se engañe, las provincias españolas con más motivos para quejarse por la hora son Huelva y Cádiz. Otra marginación. Te pones en la desembocadura del río Guadiana, y resulta que en Ayamonte son las 10 de la mañana y en Vila Real de Santo Antonio, que está enfrente, son las 9 de la mañana. Cádiz debería tener el horario de Portugal, pero nos imponen el de Alemania. La culpa dicen que la tiene Franco, que lo pactó con Hitler. Para que vean que los pactos no los ha inventado el PSOE.

Supongo que en el Ayuntamiento de Cádiz no se habrán enterado de este problema (ni de ninguno), por lo que deberá ser la Diputación la encargada de arreglarlo, según costumbre. Aprueben una declaración institucional. Como hay mejor rollito, Irene García que le pida a Mariano que se acuerden de Cádiz, a la hora de negociar con Bruselas el recorte de la hora.

Si ustedes lo piensan, ¿qué ganamos con el retraso de la hora en octubre? Tardes más oscuras, tristeza. Así se pasa más frío. No se ahorra nada de energía, ni apetece tanto ir a los chiringuitos de invierno. A ver si nos subimos a ese carro. Protesten en las calles con Teresa. Otra hora es posible.

 

José Joaquín León