EN Cádiz lo peor que le puede pasar a un ente viviente es ser humano. Es mucho mejor ser vegetal, animal, cosa o extraterrestre. Esto ha quedado de manifiesto en los últimos tiempos del kichismo. Y la guinda del pastel ha sido el cartel del Carnaval de 2023. El autor, Fabio Castro, escoltado en la presentación por los concejales Paco Cano y Lola Cazalilla, proclamó: “Este éxito se lo dedico a los animales, los árboles y los seres vivos no humanos de Cádiz”. Y se quedó tan pancho, aunque ha servido para el cachondeo. La gente no recuerda que en los coros han salido ‘Los marcianos’ y ‘Los bichitos de luz’, en las comparsas ‘Los gatos callejeros’ o ‘Calabazas’, en las chirigotas las frutas de ‘Ricas y maduras’, o ‘Los encantadores de perros’. Y así podríamos seguir poniendo ejemplos. En el Carnaval ha salido todo, incluso seres humanos, que son los que mayormente cantan.

A partir de ahí, la gente ha empezado a criticar el cartel del Carnaval, como todos los años. No tanto por la obra en sí, como por lo que dijo su autor. El cartel del Carnaval es más de dibujo que de pintura, Por otra parte, es lo normal, ya que nadie espera un cartel de Carnaval pintado por Velázquez, Murillo o Zurbarán. Ni tampoco por Picasso, un gran pintor, que era comunista. Esto último lo recuerdo para los que dicen que premian el cartel de un podemita. Esa cuestión es indiferente. Los podemitas pueden pintar obras de arte. No es imposible. Con la literatura pasa igual. Los artistas no son buenos o malos por sus ideas, sino por ser buenos o malos, no sé si lo entienden algunos. Pues algunos pelagatos de izquierda consideran que todos los de derecha son malos. Y al revés también. De ahí tantos errores y horrores.

El autor del cartel dijo cosas curiosas. Por ejemplo, lo primero que pensó era en pintar extraterrestres. Pero desistió, por el siguiente motivo: “Me tiré tres veces del Puente Canal, me di tres baños y cuando volví a casa de mi madre me di una siesta y vi esta imagen en mi cabeza”. Después, al presentarlo, dijo que se lo dedicaba a todos los seres de Cádiz que no sean humanos. Una pena, porque así ha excluido a Kichi y a los demás componentes de los coros, comparsas, chirigotas y cuartetos, que son los mayores artífices de la fiesta, y a Joaquín Quiñones, pregonero del Carnaval de 2023.

De todos modos, el Carnaval de Cai pudiera ser patrimonio inmaterial de la Humanidad, como el silbo gomero y los castells catalanes. Normalmente, en el patrimonio de la Humanidad, entran cosas de los seres humanos. Aunque en Cádiz ser humano está muy mal visto, y ya se ha visto.

José Joaquín León