EL alcalde de Cádiz dijo que no se presentaría a las elecciones municipales de 2023. Sin embargo, José María González Santos aparece en la lista de su coalición, cerrándola en el puesto 27. Algunos me dirán, con razón, que no es lo mismo que presentarse en el puesto 1 para alcalde. No es lo mismo, claro, pero incluso existen argucias legales para que un concejal situado en el puesto 27 pudiera entrar en el Ayuntamiento a lo largo de la legislatura. Y aunque no se llegue a eso, es un certificado de lo que propone esa lista: continuismo del kichismo. Con otro candidato al frente, pero con objetivos comunes, y con el patriarca de la tribu velando por la candidatura.

Se ha puesto de moda incluir a personas relevantes de cada partido cerrando las listas. Kichi va en el último puesto de Adelante/Izquierda Gaditana. Mercedes Colombo va en el último de la lista del PP. Emilio Aragón va en el último de la lista del PSOE. En otras circunstancias, Kichi, Mercedes y Emilio hubieran podido ser los candidatos de sus partidos a la Alcaldía de Cádiz. Uno ha sido (y es todavía) el alcalde, y los otros habían sonado como alcaldables en anteriores elecciones.

Esa costumbre de poner en la cola a personalidades ilustres de los partidos yo no la entiendo. Aquí la gente no lee las listas al revés, ni empieza por los puestos de abajo. Esa costumbre tiene resonancias evangélicas: “Los últimos serán los primeros” (Mateo 19, 30-20, 16). Pero, en política, los últimos suelen ser los últimos a la fuerza (porque no los dejaron situarse más arriba), o porque no se atreven ellos mismos (pues a nadie le gusta perder), y juegan al paripé.

En el caso de Kichi tiene un significado: decir que él se va, pero no lo echan. Ahí sigue, en el fondo del barco, apatrullando, con disimulo, con sus testaferros políticos por delante. El número 1, David de la Cruz, ha llegado a decir que Kichi es el mejor alcalde de Cádiz de la democracia. Contar ese chiste condiciona bastante, y lo deja en mal lugar.

En esa lista, los de Izquierda Gaditana ya no cuentan con Martín Vila y Eva Tubío, sus concejales más polémicos. Y los de Adelante Cádiz van sin Paco Cano, que era el mejor concejal de ese grupo, quizás el único aprovechable, que ha suplido las carencias de Lola Cazalilla en Cultura, ya que ella se ha dedicado mayormente a las fiestas carnavalescas y a su Instagram. La lista es peor que la anterior, lo que parecía difícil de conseguir. No obstante, en realidad, sólo es más de lo mismo. Y por eso se entiende que la clausure Kichi, aunque dijera que no se presentaría a las elecciones.

José Joaquín León