LA playa canina de Torregorda confirma que el alcalde, Bruno García, no quiere pertenecer al Partido Impopular. En Cádiz ya hay más perros que niños, según las estadísticas del INE, aunque todavía no votan. Con el tiempo, las costumbres han evolucionado. El bienestar animal está muy bien, pero no todo vale. Aún quedan seres humanos con sus derechos. He leído en un periódico: “Los perros y los nudistas tendrán playas en Cádiz”. La equiparación es odiosa. ¿No saben ustedes que los perros también son nudistas? Todavía no he visto a ningún perro en bañador, ni a ninguna perra en bikini. Aparte de eso, todavía existen la higiene y la ecología, que en este caso canino se dan la mano.
Así que los ecologistas de Agaden, que tanto cariño le tienen a las dunas de Cortadura (que han cerrado al tránsito) y a la crianza del chorlitejo, en esta ocasión tienen razón. ¡No a esa playa! Consideremos que por la ruta del Eurovelo 8, en la plataforma sobre las dunas, pueden pasar los seres humanos en bicicletas, e incluso corriendo o caminando. Sin embargo, está prohibido que pasen los perros por el Eurovelo 8. ¿Por qué? Pues porque asustan a los chorlitejos. Son unos pájaros muy sensibles.
La prohibición de perros en las playas no es por capricho, ni por fastidiar a los animales; es por higiene, y hay que decirlo claro. A los perros no se les pueden exigir ciertas responsabilidades, pero a sus dueños sí. Y, además, en las playas caninas está prohibido el baño para los humanos. Son sólo para los perros. La condición es: ellos o nosotros. Al decidir que los perros puedan retozar a sus anchas en la playa de Torregorda, se aprueba algo que no sé si es del agrado de Defensa. Pues la playa de Torregorda está colindante con una zona militar; y de vez en cuando se nota con los cañonazos.
Bruno García juega a ser como San Antón, pero debe frenarse un poco. En la campaña, ya se le vio acariciando a algunos canes que no debían ser perrofláuticos. Canes de buenas familias y pedigrí, como los de Bahía Blanca, que pasean por Santa María del Mar. Los del Paseo Marítimo también pueden pasear por la playa Victoria, fuera de la temporada estival. Pero el verano es diferente. Además de la salud del chorlitejo, están la higiene y la limpieza. Abrir una playa canina en Torregorda, al lado de la nudista de Cortadura, también tiene su mensaje. Por no hablar del aparcamiento para caravanas que funciona en Santibáñez durante todo el año, sin pagar zona azul, como en el Paseo.
A veces un alcalde debe ser impopular, aunque milite en el Partido Popular.
José Joaquín León