TRES días de luto oficial en Cádiz marcan el recuerdo del primer alcalde de la democracia. Carlos Díaz Medina pilotó un tiempo para la ciudad, que no fue sólo la transición desde la dictadura franquista a la democracia, sino el puente desde un Cádiz en blanco y negro a un Cádiz en color. El blanco y negro de las fotos se terminó con Carlos Díaz y el color empezó con Teófila Martínez. No lo escribo en peyorativo, porque el blanco y negro hoy está mejor considerado que nunca, se vuelve a las viejas fotos como se retorna a la nostalgia. Carlos Díaz fue el único alcalde posible para su tiempo. Fue un quijote que peleó contra los molinos de viento de la incomprensión. Hoy le alaban muchos que antes lo despreciaron.

Abandonó la política a finales del siglo pasado, y desde entonces se le ha visto como una parte de la historia de Cádiz en el siglo XX. Juman recibió la Medalla del Trabajo en 1986 y ya habían empezado las fotos de Kiki. Unas fotos en blanco y negro, que tenían en los 80 como figura a Manolo Torre, que ganaba premios internacionales de fotografía. Manolo Torre, que es de derechas, me enseña una foto en color en la que está abrazado con Carlos Díaz. Pero sería mejor sepiarlo: aquel tiempo era en blanco y negro.

Fue elegido por casualidad. En principio, Carlos Díaz iba en la lista como número 7, para ser concejal de Parques y Jardines. Los aspirantes del PSOE para la Alcaldía eran Jaime Pérez-Llorca y José Manuel Duarte, pero las familias socialistas no llegaron a un acuerdo. ¡Qué raro! Según me contó su fiel secretario, Ignacio Moreno, hubo una reunión en casa de Vargas Machuca, en la que llamaron por teléfono a Alfonso Guerra, para pedirle consejo. Como no había acuerdo, Guerra recomendó que pusieran a otro. Entonces pensaron en Carlos Díaz.

Llegó a la Alcaldía en 1979, con el pacto de izquierda entre PSOE, PSA y PCA. En su primer gobierno local había nueve socialistas (Carlos Díaz, Gregorio López, Hipólito García, Serafín Gutiérrez, Manuel Castro, Josefina Junquera, Juan José Gelos, Luis Pizarro y Gaspar Jiménez), cuatro andalucistas (Armando Ruiz, José Sáez, Inocencio de León y Antonio Ramos) y dos comunistas (Manuel Gómez de la Torre y Pepe Mena). Después ganó tres veces con mayorías absolutas, hasta que se lo cargaron los suyos en 1995.

La mejor foto en blanco y negro de Carlos Díaz es la del fin del peaje del puente Carranza. Fue paseado a hombros ese día. Algunos de los que lo jalearon después lo echaron. Así era Cádiz y así es la política.

José Joaquín León