FALTAN siete días para las elecciones en el País Vasco. Los de EH Bildu sueñan con ganar. Sería su primera vez. ¿Pasearán en gabarra? El mejor padrino para botarla sería Pedro Sánchez, que tanto les ha ayudado, hasta el punto de que ya pocos se acuerdan de que son los sucesores políticos de ETA y no han condenado ciertos crímenes. El PSE dice que no les darán sus votos para gobernar. Pero los de EH Bildu sonríen, pues saben que los sanchistas dicen algo y hacen lo contrario, o al revés. Otxandiano imita la campaña del BNG en Galicia. Habla sólo de temas sociales. Es la piel del cordero para ocultar al lobo. Y, probablemente, va a pasar lo mismo. Muchos votos del PSE, Sumar y Podemos se irán a los bildutarras.

Estas elecciones se disputan entre el PNV y EH Bildu. Es decir, entre una derecha nacionalista y una izquierda de sucesores de etarras blanqueados de cara a la galería. Han guardado la petición de independencia en el cajón. ¿Por qué? Porque sólo un 30% de los vascos quieren la independencia, y es una tendencia que va a menos, según las encuestas. Sólo el 18% de los votantes del PNV son independentistas. Aunque sorprende la irrelevancia del PSE y el PP.

El PSOE (que allí es el PSE) aspira a ser tercero. Y el PP es improbable que mejore el cuarto puesto. Según sea el reparto de escaños, el PSE puede recibir la llave para completar la mayoría al PNV o EH Bildu. No obstante, pudiera ocurrir que EH Bildu sea el partido más votado, pero sea factible una mayoría absoluta alternativa entre el PNV, el PSE y el PP. Ahí se retratarían.

Por tanto, la clave de esas elecciones estará en la igualdad, los indecisos, y ojo: la abstención. Como en Galicia, la mayoría absoluta se va a jugar en el espacio de uno a tres escaños. Y para la reflexión queda algo tremendo: en 2009 fue elegido lehendakari el socialista Patxi López, con los 25 votos del PSE, que fue segundo, y los 13 del PP, que fue tercero. En total, 38, la mayoría absoluta. Patxi duró menos de cuatro años. En las últimas elecciones vascas, el PSOE obtuvo 10 escaños y el PP se quedó con 6. Desde que ETA no asesina, ambos han perdido más de la mitad de sus escaños.

En el País Vasco sólo viven 2,2 millones de habitantes. Es como la cuarta parte de Andalucía, que tiene 8,6 millones de habitantes. No es como Cataluña, que ya llega a 8,0 millones. Las elecciones vascas son importantes para ellos. Y también para ver si EH Bildu gobierna, cuando han pasado seis años desde la disolución oficial de ETA.

José Joaquín León