ALGUNAS  veces los políticos están mejor callados. Mire usted, si lo han colocado como candidato por la provincia de Cádiz, no pasa nada. No es la primera vez que el PSOE sitúa a un paracaidista para que aterrice en la provincia, que es una forma de decir que aquí no tienen a nadie mejor. En  vez de colocar a Juan Carlos Campos, que es un magistrado de la tierra y que ya ha sido diputado del Congreso y vocal del Poder Judicial, prefieren a otro magistrado de por ahí, que es ministro de Interior con Pedro Sánchez. A los partidos se les nota que las primarias son un camelo. A los Ciudadanos de Castilla y León les salieron más votos que votantes con Silvia Clemente. A los socialistas de Cádiz les ha salido el grano de Marlaska. Para disimular, es mejor nombrarlos a dedo.

Después vienen con los méritos. Cuando aterrizó Alfredo Pérez Rubalcaba recordó su origen montañés. Venía como un chicuco de Zapatero. Pero lo de Fernando Grande-Marlaska ha superado todo lo anterior. Dijo en Onda Cero: “Yo paso la primera semana del año en Rota con mi marido y mis tres perros”. Una costumbre que mantiene desde hace seis o siete años (ya no se acuerda bien si son seis o siete), en una casa de su hermana en Costa Ballena.

Es una reflexión que tiene mucha mandanga. ¿Qué es lo que más les llama la atención? A mí lo de los tres perros. Esos tres perros están acumulando méritos para ser gaditanos cuneros. Menos mal que no los pueden incluir en las listas, que si no se postularían. También me llama la atención que pase los primeros días del año (es decir, de enero) en Costa Ballena, cuando están en temporada muy baja, en vez de ir en agosto.

No obstante, él mismo ha reconocido que “no es mucho”. Marlaska no ha salido en un coro callejero, ni ha sido cargador, ni ha tocado en una agrupación musical, ni se ha fotografiado con una bufanda del Cádiz. ¡Ay! Siempre le quedará La Viña para darse un paseo como Sabina. Aunque tampoco se trata de que Irene García lo nombre Hijo Predilecto de la Provincia. Sabíamos que los gaditanos nacen donde les sale de los co… Y las gaditanas donde les sale del co… Pero no sabíamos que si  un ministro viene con su marido Gorka y tres perros ya se puede considerar casi gaditano como tú.

Marlaska, como ministro, ha venido más al Campo de Gibraltar. Esta es una provincia fronteriza entre el sur de Europa y el norte de África, por lo que un ministro del Interior encaja perfectamente. Y si no gana unas primarias también lo van a encajar. Esto funciona así. Sobran las explicaciones.

José Joaquín León