LOS negacionistas y la gente maliciosa no se creen las cifras que dan los gobiernos en la pandemia. ¿Qué gobierno? Los 17 de la cogobernanza, incluida la Junta de Andalucía,…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
HEMOS leído en la prensa: “El Cecop monta un dispositivo especial para la Cuaresma y la Semana Santa”. Y lo hemos leído la semana pasada, en plena tercera ola, no fue hace dos años. Algunos pensarán que el Cecop actúa como si no hubieran suspendido todos los cultos externos de…
CATALUÑA es España, pero las elecciones de Cataluña no son como las de España. Además, cuando sólo ha votado el 53,54% del censo electoral (en 2017 votó el 79,09%), los resultados están distorsionados por la pandemia. Un ejemplo: dicen que la mayoría de los catalanes han votado a partidos independentistas,…
LOS negacionistas y la gente maliciosa no se creen las cifras que dan los gobiernos en la pandemia. ¿Qué gobierno? Los 17 de la cogobernanza, incluida la Junta de Andalucía, y el desunido de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. Los negacionistas y la gente maliciosa dicen que el número de los muertos sube y baja, según los días, y que la tasa de contagios sube y baja, según conviene. Teniendo en cuenta que ya se sabe lo que ocurre: a las dos semanas de un puente festivo o unas vacaciones llega una nueva ola, modelo maremoto de la Palma; y a las dos semanas de haber cerrado todo lo que abría pues empezamos a desescalar otra vez, hasta la siguiente. Estas oscilaciones, de por sí pesadas, se han notado bastante en Cádiz y en Jerez, entre otros municipios de la provincia.
HEMOS leído en la prensa: “El Cecop monta un dispositivo especial para la Cuaresma y la Semana Santa”. Y lo hemos leído la semana pasada, en plena tercera ola, no fue hace dos años. Algunos pensarán que el Cecop actúa como si no hubieran suspendido todos los cultos externos de las cofradías (vía crucis y traslados inclusive), pero no es eso. El Cecop vigilará las colas de las exposiciones organizadas por el Consejo, los aforos de los teatros y otras así. Puede que incluso los aforos de las iglesias, que hoy aumentarán al 50%, si Dios quiere y el comité de expertos de la Junta permite que la ciudad de Sevilla pase al nivel 3 de las restricciones. El Cecop no se rinde. Una Cuaresma sin Cecop no es Cuaresma. Ya son como las torrijas, un elemento costumbrista propio de la idiosincrasia cuaresmal sevillana. Y han debutado. El pasado lunes, sin ir más lejos.
EL pasado lunes falleció en Málaga, a los 94 años de edad y víctima del Covid, el fraile carmelita José Luis Zurita Abril. Había nacido en Melilla en 1926, aunque la gente creía que era malagueño. En Cádiz se le veía como un padre para el barrio del Mentidero, en el que dejó una huella que aún se recuerda. Los años de fray José Luis Zurita en la entonces parroquia de Nuestra Señora del Carmen y Santa Teresa serán inolvidables, probablemente los últimos del esplendor carmelita en Cádiz, los que desembocaron en la coronación canónica en 2007, que debió llegar antes. Los problemas de supervivencia en el Carmen gaditano quizás comenzaron cuando trasladaron a José Luis Zurita, que era un un fraile carismático y que profesó un amor a la Virgen del Carmen de Cádiz a prueba de todo. Bajo su manto estará ya con el escapulario que siempre defendió, a capa blanca y con la espada de su verbo encendido, que llegaba al corazón de quienes lo conocieron.
CATALUÑA es España, pero las elecciones de Cataluña no son como las de España. Además, cuando sólo ha votado el 53,54% del censo electoral (en 2017 votó el 79,09%), los resultados están distorsionados por la pandemia. Un ejemplo: dicen que la mayoría de los catalanes han votado a partidos independentistas, pero en realidad sólo le han dado su apoyo un catalán y pico de cada cuatro censados; y se abstuvieron casi dos catalanes de cada cuatro. Los resultados conflictivos y la escasa participación obligan moralmente a convocar otras elecciones cuando se inmunice el rebaño, en las que podría pasar de todo, incluso lo mismo. Pero en los resultados hay un aspecto interesante para la política nacional: la hecatombe del centro derecha y el avance de Vox.
EN la ciudad de Cádiz, cuando se hablaba de cepas, siempre se remitía a La Cepa Gallega, de la calle Plocia, con su buen ambiente. Pero ahora se ha puesto de moda la cepa británica, que ha llegado de Gibraltar, como los estraperlos, pero referida al coronavirus. Por culpa del aeropuerto de los yanitos, que era un coladero de cepas británicas, en la ciudad de La Línea, y en toda la comarca del Campo de Gibraltar, se pusieron de coronavirus hasta arriba, con tropecientos casos estraperlados por cada 100.000 habitantes, y con todo lo no esencial cerrado. Desde allí se la han contagiado al resto de la provincia gaditana, a pesar de los confinamientos perimetrales. Ayer el consejero Jesús Aguirre dijo que la semana próxima la cepa británica superará a la cepa de Wuhan en Andalucía. Se advierte para quien no lo sepa.
Ya estamos en Cuaresma. Después de dejarnos sin Carnaval, ahora le toca a la Semana Santa. Es un complot contra las esencias y las fiestas más enraizadas en esta trimilenaria ciudad. Y en los alrededores, pues no se salva nadie de las restricciones. Juanma Moreno y Juan Marín, en sus declaraciones recientes, han admitido que están acongojados. Pues la cepa británica se contagia que es una maravilla. También han dicho que vienen “picos duros”, como suelen ser los picos, por otra parte. Un pico blando no es un pico en condiciones. Y así las cosas, es probable que las medidas no se relajen para Semana Santa. O sea, que puede que impidan viajar entre Cádiz y San Fernando. Después dirán que los gaditanos son muy catetos porque han recorrido poco mundo. Excepto los emigrantes.
Algunos cofrades se frotaban las manos pensando en viajar para ver las exposiciones organizadas en Sevilla, Málaga o Antequera, no sólo la del Museo en Cádiz. Sin embargo, los aguafiestas de la Junta han rebajado las expectativas. Y nos advierten que esta provincia es la apoteosis de la cepa británica. En Cádiz ya es la predominante, por encima de la cepa china de Wuhan, según dice el consejero Aguirre. Como sigamos así, con la cepa británica, en Cádiz todos hablarán inglés, en vez de gadita, o puede que lenguas extrañas, como el día de la Torre de Babel.
Los más ultras proponen: ¿y por qué no les cerramos la Verja otra vez a los yanitos? Consideran que la cepa británica ha entrado por culpa del libertinaje permisivo, y por ir a comprar chocolate de todo tipo cuando no había que desplazarse a Gibraltar. Los puertos y los aeropuertos necesitan más vigilancia, según dijo Juanma Moreno. Todo lo malo viene de fuera, y por eso encierran a la gente. Ya sólo faltaría que aparezca la cepa gaditana.
José Joaquín León