LA provincia de Cádiz es una potencia gastronómica. Esto lo dijo Ferrán Adriá, cuando vino para el Innovazul de la Zona Franca. Y lo ha certificado la Guía Michelín. En…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
HA sido estupendo que los Reyes de España entregaran ayer una de las Medallas de las Bellas Artes al Gremio de Arte Sacro. La recibió su presidente, Francisco Carrera Paquili.Y, además del reconocimiento que supone para el Arte Sacro, lo es también para el esfuerzo de Paquili, que es un…
VOLVEMOS a nuestra Antología del Relato, según don Pedro, que ha sido paseado bajo palio en su congreso. Otro relato que gusta mucho, y que se difunde a tontas y a locas, es que el PP hace el ridículo en Europa, mientras que el PSOE está a la altura de…
LA prevención de la catástrofe de Valencia fue lamentable y contribuyó a agravar sus consecuencias. Pero la gestión posterior ha sido bochornosa, indignó a la gente, y ha demostrado la incapacidad del Gobierno de España y de la Generalitat valenciana para organizar el salvamento y la reconstrucción. No es un problema de ideologías, de derechas ni de izquierdas, sino de incompetencia. Al día siguiente de las inundaciones, aparecieron Pedro Sánchez y Carlos Mazón hablando de unidad, y de trabajar juntos en beneficio de los ciudadanos. A partir de ahí, ya se sabía lo que pasaría: justo lo contrario de lo que decían.
ESTE debate es antiguo. Se planteó en la posguerra, cuando José Luis Arrese, el primer ministro de Vivienda nombrado en este país, dijo aquella frase lapidaria: “Queremos una España de propietarios, no de proletarios”. El franquismo era una dictadura, pero tenían claro que debían apostar por la vivienda pública. Aunque duela decirlo, la mayoría de las barriadas que existen en este país proceden del franquismo. En Cádiz, ese asunto está clarísimo. La polémica entre propietarios o proletarios ha vuelto a surgir a cuento de los terrenos de Navalips. Ni que decir tiene que la izquierda gaditana está contra los propietarios, pues su concepto de la igualdad pasa porque todo el mundo sea pobre, y no porque los pobres dejen de serlo. Así todos vivirán de la ayuda pública.
HOY, a las ocho de la mañana, comienza la venta de sillas para la procesión extraordinaria del II Congreso Internacional de Hermandades y Piedad Popular. Que nadie se confunda. Esta vez no habrá largas colas en la Puerta Jerez, como es costumbre con las sillas y palcos de Semana Santa. Esta vez las colas se formarán en la plataforma digital Giglon, que ha sido la adjudicataria. Y no nos damos cuenta, pero lo que suceda con la venta de las sillas para la procesión del 8 de diciembre puede marcar un antes y un después en Sevilla. No significa que se adopte un sistema semejante para las sillas de la Semana Santa y el Corpus, pero nunca se sabe a dónde vamos a parar. Tampoco se sabía que podríamos solicitar las papeletas de sitio para salir de nazareno en la casa hermandad digital, y ya nos hemos acostumbrado.
SEGUIMOS con las promesas del fin de los solares desperdiciados en Cádiz. Otro solar de gran categoría es el de la calle Tolosa Latour. El nuevo proyecto de la Junta de Andalucía nos obliga a meter los dedos en la llaga. Si no lo veo, no lo creo, como dijo Santo Tomás. Se supone que en 2028 el solar de Tolosa Latour será un edificio de la nueva Ciudad Administrativa de la Junta de Andalucía. La Junta de Manuel Chaves vendió la idea de la Ciudad de la Justicia y ahora la Junta de Juanma Moreno valora el proyecto de la Ciudad Administrativa. Por medio quedarían más de 30 años, en los que ese solar no ha servido para nada, y ha sido un ejemplo de la desidia y el abandono de Cádiz como ciudad de la injusticia.
CON la muerte de José Luis Garrido Bustamante se nos va un pionero de la televisión y la radio en Andalucía. Tras su fallecimiento, se han recordado sus méritos, que son múltiples y variados. Fue el estandarte de RTVE en Andalucía, en los años de la transición, una voz solemne e inconfundible, que venía de Radio Nacional de España, y que se amoldó a la televisión hasta convertirse en su referente andaluz cuando la autonomía estaba recién nacida. José Luis fue la voz de su tiempo. Y para los sevillanos fue algo más: la voz del cofrade. Es decir, fue el profesional que consagró la televisión como un medio de comunicación esencial para las cofradías. Encumbró la pequeña pantalla como una referencia imprescindible para la difusión de la Semana Santa.