EL Ayuntamiento de Cádiz ha aprobado nueve calles nuevas. Con demasiado secretismo, sin darle el realce que merecerían los distinguidos . Es el caso del imaginero Miguel Láinez Capote, que tendrá por fin su calle, según dio a conocer el Consejo Local de Hermandades y Cofradías. Otra calle aprobada es la plazoleta Canal de Ponce, en recuerdo y homenaje a Francisco Ponce Cordones, que fue su descubridor. También han dedicado tres plazas: a Pedro Payán, La Roldana y Enrique Blanco, igualmente unos jardines a Pilar Paz y a las víctimas de la Taliomida, así como una calle a Milagros Rendón y un pasaje a  Inocencio Gómez.

La calle de Miguel Láinez Capote es la que conecta la plaza de Fray Félix con la Catedral. Láinez talló la imagen de Jesús Cautivo (Medinaceli), así como Jesús del Mayor Dolor (Sanidad) y el anterior Cristo del Perdón, que fue sustituido(acertadamente, todo hay que decirlo) por el actual de Ortega Bru. También talló otras imágenes de la Semana Santa, algunas posteriormente retocadas. El lugar es adecuado, por ser el autor de las imágenes titulares de las tres cofradías de Santa Cruz que formaron la Madrugada de Cádiz en los años de la posguerra.

Tendrá una plaza el Canal de Ponce, en homenaje a su descubridor, Francisco Ponce Cordones. En un artículo publicado en Diario de Cádiz demostró la existencia de este canal, que dividía en dos a la ciudad antigua, desde la Bahía a la Caleta. La plazoleta que le dedican es la que está junto al Baluarte de los Mártires.

A Pedro Payán, mi querido autor de El habla de Cádiz, por fin le han dedicado una plaza sin nombre que está frente a la de San Mateo. Sólo por El habla de Cádiz ya se lo merecía, pues es el verdadero diccionario del idioma gadita. Pedro es un gaditano cabal, que siempre está (y sigue) al servicio de su ciudad. Igualmente es justo que le dediquen a Pilar Paz Pasamar los jardines junto a la Biblioteca Adolfo Suárez, cerca de Guillén Moreno. Pilar fue la gran poetisa gaditana de la posguerra. Es una pena que no haya podido disfrutarlo en vida.

Según parece, querían poner más nombres de mujeres a las calles. Se aprueba la plaza Luisa Roldán La Roldana, en La Laguna, el barrio de las calles de artistas. Era incomprensible que no tuviera una calle en Cádiz. La Roldana talló, entre otras, las imágenes de los Santos Patronos y el Ecce Homo de la Catedral. La hija de Pedro Roldán fue una pionera, que eclipsó a su marido, Luis Antonio de los Arcos, cuando en su tiempo lo normal era que la mujer hiciera el trabajo y el marido lo firmara.

Poco a poco, va mejorando el callejero.

José Joaquín León