LOS partidos siguen sus estrategias, con criterios en los que unas veces aciertan y otras se equivocan. De cara a las elecciones municipales, Ciudadanos tenía posibilidades de conseguir la Alcaldía de Cádiz, según las proyecciones más optimistas para esta formación. Aunque el duelo se plantea, teóricamente, entre Adelante Cádiz, encabezado por José María González, y el PP, liderado por Juancho Ortiz, hay otras opciones. Entre ellas, los aspirantes a la sorpresa: Fran González, por el PSOE, y el candidato de Ciudadanos... Juanma Pérez Dorao estaba bien posicionado por sus relaciones con los candidatos del PP y del PSOE. Pero entonces se consumó la tragedia. Ya se ha confirmado que el candidato será Domingo Villero.
En las elecciones andaluzas, Ciudadanos consiguió más votos que el PP en Cádiz capital, aunque menos que Adelante. Ese dato se ha valorado, quizá demasiado, porque los resultados de las elecciones andaluzas en Cádiz nunca han guardado relación con las municipales en casos anteriores. Y, además, hay otro test más próximo: las elecciones generales del 28 de abril. Tampoco anticiparán el resultado de las municipales, pero permitirán observar tendencias.
Con esos condicionantes, y con esas salvedades, el papel de Ciudadanos era y debe ser estimable. Está por ver hasta qué punto les perjudica la trifulca que han montado. Juanma Pérez-Dorao y María Fernández Trujillo tenían una capacidad negociadora que les podía dar la llave para elegir al futuro alcalde de Cádiz. No se descartaba un pacto con el PP, ni tampoco con el PSOE. Ni siquiera hubiera sido descartable un tripartito anti-Kichi (PP-PSOE-Cs), para el que no haría falta Vox, que resultaría inútil.
La designación de Domingo Villero como candidato de Ciudadanos se ha confirmado cuando faltaba un mes y medio para votar. El decano-presidente de los ingenieros técnicos y peritos industriales tiene una ardua tarea, que es recomponer las relaciones y potenciar su candidatura. Con el inconveniente de no estar en el Ayuntamiento y de que los concejales de Ciudadanos son ahora no adscritos y van a su libre albedrío.
En teoría, la situación beneficia al PP (y también al PSOE) para pescar en los caladeros del centro, que en Cádiz es un voto muy importante. Ciudadanos sale con la misión de recuperar el tiempo perdido, cuando el debate está en otros ámbitos. El tiempo nos dirá si sus extrañas decisiones (incluido el injustificado retraso para confirmar la designación de Domingo Villero) han sido acertadas o erróneas.
José Joaquín León