EL mejor homenaje que le pueden tributar a Manolo Santander Cahué es declarar su legendario pasodoble “Me han dicho que el amarillo”, de ‘La familia Pepperoni’, como himno oficial del Cádiz CF. Eso del “himno oficioso” suena chungo. ¿Qué himno ha tenido este club que haga vibrar y entusiasme a los cadistas? Manolito Santander dio con la tecla. Sin proponérselo, como ocurren las grandes cosas. Aquella chirigota, como casi todas las agrupaciones históricas que han entrado en la leyenda, ni siquiera ganó la final de 1998. Quedaron cuartos. ¿Y qué más da? Con el tiempo, sólo los mitos pasan las pruebas del algodón y del olvido. Manolo Santander, incluso en vida, ya estaba entre los personajes legendarios del Carnaval.

En su fallecimiento, que por desgracia era una muerte anunciada, se recuerdan sus méritos artísticos. Sí, artísticos, porque era un artista. Su espíritu viñero y caletero formaba una de sus raíces esenciales, y lo emparentaba con Paco Alba, Antonio Martín y otros grandes. Su estilo chirigotero estaba vinculado a las formas gaditas. Tanto en el compás como en las temáticas. El estilo de Santander era del Cádiz auténtico.

Y no todo le fue fácil, ni bonito. Vivió momentos difíciles en lo personal, como trabajador de Delphi que fue. Pero también lo pasó mal en lo carnavalesco, cuando algunos decían que se había quedado antiguo (por no caer en concesiones contra su estilo) y que abusaba de ser demasiado explícito con los tacos. En eso también fue fiel a las chirigotas de antaño. Al final, tapó muchas bocas, con su resurrección de los últimos años. Ese primer premio de 2019, que otras veces le regatearon, se lo lleva hoy al cielo con ‘La maldición de la lapa negra’, que firmó en coalición con José Manuel Sánchez Reyes, y que ya es otra chirigota legendaria.

En la historia del Carnaval habrá unas 20 coplas que cualquier aficionado se sabe de memoria. Pero se pueden contar con los dedos de una mano las que conocen incluso los que no son aficionados. Empezando por “Los duros antiguos” del Tío de la Tiza, y siguiendo por el pasodoble del “Vaporcito”, de Paco Alba. En esa mano de lo que canta el pueblo, está “Me han dicho que el amarillo”, el Himno Oficial del Cádiz CF.

En esa mano (la del Dios Momo) está Manolo, poniendo los vellitos de punta con el amarillo, que está maldito para los artistas y es gloria bendita para los cadistas. Después de un calvario de decepciones, y de lo que ha sufrido en sus últimos meses, hoy tendrá la cara pintada de amarillo, y saboreará la gloria bendita de su cielo caletero.

José Joaquín León