LA autovía entre Huelva y Cádiz no será construida. Es una utopía que viene de antiguo, y que reaparece de vez de vez en cuando. Sorprendentemente, cuenta con apoyos en Huelva y con rechazo en Cádiz. Al parecer, les interesa más a los onubenses acercarse al norte de África que a los gaditanos aproximarse a Portugal. La polémica se ha avivado por un desajuste entre dos consejeras del PP. La de Agricultura, Carmen Crespo, dijo que no existe ningún proyecto de autovía y que Doñana es lo primero. Después, la de Fomento, Marifrán Carazo, dijo que Doñana es lo primero, y que se respetará, por supuesto, pero que están trabajando en un estudio para ver si lo incluyen en el plan de Infraestructuras de 2021 a 2027. Siempre que sea viable, claro. Y les anticipo que no lo será.

Aunque el trazado no pasaría por Doñana, es irrealizable actualmente por su alto coste. Incluye la necesidad de atravesar el río Guadalquivir  en algún punto, para lo que sería necesario construir túneles. Y se da la circunstancia de que actualmente están paralizadas las obras de la autovía de la SE-40, entre Dos Hermanas y Coria del Río, precisamente por ese motivo. Los túneles cuestan 800 millones de euros.

Esa obra, la de la SE-40, ya prevista, debe ser la nueva autovía de Cádiz a Huelva. Permitirá el viaje sin atravesar Sevilla por el puente del Centenario, donde actualmente hay frecuentes atascos. El enlace previsto entre Dos Hermanas y Coria acortará en media hora, aproximadamente, la duración del viaje entre Cádiz y Huelva. Por tanto, el esfuerzo se debe hacer para rematar esa obra, que depende del Ministerio de Fomento, cuyo titular, José Luis Ábalos, está en funciones. De teatro, mayormente.

Así que tranquilidad, señor alcalde de Cádiz. Y menos populismo. No se preocupe que ni usted, ni yo, ni nadie, va a circular en los próximos años por la supuesta autopista modelo Amazonas que cruzaría Doñana. En las redes sociales, el alcalde suele ser más Kichi que nunca. Así puede dar salida al genio anticapitalista que lleva dentro. Hace ya algunos días, publicó lo siguiente: “Lo mismo que Bolsonaro en el Amazonas, donde arden hectáreas para el interés de tres empresarios, PP, Cs y Vox quieren construir una autopista en Doñana”.

Primero, no sería una autopista, sino una autovía. Segundo, no pasaría por Doñana. Tercero, no la apoyan PP, Cs y Vox, sino que una consejera propone un estudio. Cuarto, ¿qué tienen que ver los incendios de Bolsonaro con una autovía entre Huelva y Cádiz? Quinto, vamos a llevarnos bien, joé.

José Joaquín León