LAS playas de Cádiz han vuelto a abrir al público, para el paseo de los niños. Aunque siguen con bandera roja para prohibir el baño. Ha sido un gran acierto del alcalde adoptar esta sabia medida. En las normas para la desescalada del confinamiento, se le debe reconocer que ha estado más en plan de José María González Santos que como camarada Kichi. Es decir, ha adoptado una decisión al servicio del bien común. En Cádiz viven pocas personas a más de un kilómetro de la playa o de un paseo marítimo. Así que prohibirlas, como he comentado en otras ocasiones, no sería de izquierda, ni de derecha, sino una carajotada. Yo no entiendo por qué otros alcaldes de la Bahía mantienen cerradas sus playas a la infancia.

Se debería recordar que en las playas de Cádiz, a finales de abril, está permitido el acceso de los niños acompañados, en las condiciones sabidas, pero no a los perros. A diferencia de lo ocurrido hasta ahora, los niños tienen un privilegio sobre los perros. En Cádiz han abierto los parques, otro acierto de Kichi; si bien aquí el espacio número uno para el ocio es la playa, que funciona como un gran parque marítimo.

Y ahora me voy a referir a la bandera roja playera. Bandera Roja suena a lo que suena. En España fue un partido político comunista maoísta. Se denominaba Organización Comunista de España-Bandera Roja. Tuvo cierto eco en Cataluña y se disolvió en 1989, cuando se integraron en el PCE y el PSUC. Es decir, que si queda alguno habrá llegado hasta Unidas Podemos. Esto lo cuento porque entiendo que en el Ayuntamiento de Cádiz le tengan aprecio a la bandera roja. Pero, a día de hoy (y aunque la culpa no sea de Kichi, sino de Pedro Sánchez y sus asesores locos), habría que explicar por qué sigue prohibido el baño.

¿El coronavirus se puede contagiar en el mar? El microbiólogo José Antonio López Guerrero dijo en Cuatro: “En el mar no hay ningún riesgo de contagio”. Y añadió que el peligro en las playas será la proximidad de otras personas, por lo que se aconseja la distancia social. En cuanto a las piscinas, son seguras, porque utilizan cloro que es un desinfectante. Sin embargo, en Costa Rica, alertaron de algunos contagios entre surfistas. Y una epidemióloga de Puerto Rico denunció el riesgo de que lleguen a las playas aguas fecales, donde el coronavirus podría sobrevivir algunas horas.

Los expertos se deben aclarar. Pero si el coronavirus no se contagia en el mar, como parece bastante seguro, la bandera roja se debe retirar. Y si no les gusta la bandera verde, porque les suena a Vox, que la pongan amarilla, que nos recuerda al Cádiz.

José Joaquín León