OTRA vez se ha liado por culpa de la Edusi. Esta vez porque el alcalde de Cádiz organizó una gala en la Casa de Iberoamérica para presentar a la Edusi en sociedad. El señor González Santos posiblemente no sepa que eso lo hacían antes con las hijas de las marquesas y las condesas y las duquesas, que las presentaban en sociedad, a la gente participativa, para que el Ignacio Casas de entonces les hiciera unas fotos y demás. Y se ofrecía un cóctel. Así que nuestro alcalde ha presentado a la Edusi como si fuera la hija de una marquesa, para que todo el mundo vea que al marqués de la Buena Gente la niña le ha salido estupenda, listísima y guapísima, y se merece un partido con una buena dote.
El portavoz del PP, Ignacio Romaní, ha protestado, porque dice que la Edusi procede de los barrios de emergencia social, y eso es lo que arreglarán con el dinero que soltarán, si es que lo sueltan. Y que, además, ofrecieron un ágape al final, con su catering y todo. Esto último, Ignacio, es bueno para la hostelería. Ya no se recordaba en Cádiz, donde los actos municipales son a palo seco (esto es, sin palillo), con la excusa de la crisis. Perdiéndose así la tradición municipal del croqueteo (ya muy venida a menos con Teo, pues con Carranza y Almagro era marisqueo), que ahora se ha recuperado en parte, gracias a la fiesta de puesta en sociedad de nuestra querida Edusi.
Romaní, no seas aguafiestas. ¿La Edusi viene de los barrios pobres, esos por donde hay gente tirada, según nuestro alcalde? Pues no sé qué decirte. Tirados de verdad, y sin ágapes, están en la céntrica plaza de las Tortugas al relente de la noche. Pero nuestra Edusi no estaba tirada, excepto que se caiga, como el pellejazo que se dio con Laura la primera vez. Nuestra Edusi es riquita de cuna, pero de buen corazón, y podría donar 15 millones de euros para las obras de caridad. Y a las marquesas (o los marqueses de espíritu) siempre les ha gustado la beneficencia solidaria, y organizaban cenas benéficas de gala, que eran como ágapes con glamour, y así recaudaban para los pobres.
Además, con el dinero que se han ahorrado en los premios Libertad Cortes de Cádiz, que se los han cargado por el mismo sistema que a las ninfas (por las buenas, en silencio, y con toda la oposición haciéndose los suecos), pues con esa pasta habrá organizado el catering de la fiesta de sociedad de la Edusi. Para confraternizar con las amistades en estas vísperas navideñas.
Es bien sabido que a la Edusi la quiere todo el mundo. Y tiene muchos pretendientes, a ver si dan el braguetazo.
José Joaquín León