LA Sevilla megalómana va por rachas. Aspira a superar los 700.000 habitantes, a sabiendas de que en la realidad tiene más de un millón, si sumamos los del entorno periférico y los turistas que la llenan en su centro histórico. Sevilla es una gran ciudad y no se duda. Pero la megalomanía puede desbordar el desarrollo razonable. El nuevo presidente del Puerto de Sevilla, Rafael Carmona, ha anunciado su voluntad de agilizar los trámites para el gran proyecto de Sevilla Park, en los suelos portuarios del Batán. Cuenta con el compromiso de la nueva consejera de Fomento, Marifrán Carazo (ambos del PP), para desbloquear un proyecto que se había ralentizado, con toda la pinta de seguir el modelo tradicional de mucho hablar y no hacer nada.

Supongamos que el proyecto de Sevilla Park sale adelante. Escribo supongamos porque aún le faltan trámites básicos, entre ellos aprobar la modificación del PGOU para la recalificación de los suelos. El proyecto está promovido por Impulsa Eventos e Instalaciones, empresa que gestiona los palacios de deportes de Madrid y Barcelona. El WizinkCenter (que es el Palacio de los Deportes de Madrid, ubicado en el barrio de Salamanca) y el Palau Sant Jordi barcelonés tienen un rendimiento deportivo que en Sevilla no es posible actualmente, excepto que se recupere un gran equipo de baloncesto, como aquel Caja San Fernando, capaz de competir con el Real Madrid y el Barcelona.

Según parece, funcionaría más bien como auditorio de espectáculos para unas 20.000 personas. Puede tener público, por supuesto, y ser rentable. Pero también están para eventos y recitales los espacios de la Cartuja (el estadio, el Auditorio Rocío Jurado y el Cartuja Center), además del auditorio de Fibes y el Palacio de los Deportes de San Pablo. Hasta ahora los grandes espectáculos y artistas nacionales e internaciones que han querido incluir a Sevilla en sus giras han venido y han actuado.

En cuanto al centro comercial, recordemos que se ha inaugurado uno nuevo, el de Torre Sevilla, y está previsto abrir otro en otoño, el Lagoh de Palmas Altas, anunciado como el mayor centro comercial de España. ¿Hay clientes para un nuevo centro comercial, cerca del mayor de España? Puede que sí, aunque sin ser pitoniso auguro que alguno se arruinará antes de 20 años y se quedará como experiencia fallida, como ha ocurrido con el de Plaza de Armas en la antigua estación de Córdoba.

Como se suele decir, el pez grande se comerá al chico. Pero mira como beben los peces en el río y vuelven a beber para lanzar proyectos ambiciosos de altos vuelos.

José Joaquín León