SIGO con el triduo de los centros comerciales. La proliferación está llamando la atención. ¿Hay demasiados ya en Sevilla? Es razonable pensar que sí. Cada vez son mayores y con pretensiones más ambiciosas. Aunque sorprender es difícil. No había ninguna tienda de Primark, pero en el centro de Torre Sevilla la abrieron hace un año, y mañana será inaugurada la segunda en el Lagoh de Palmas Altas. Inversiones que en su día fueron elogiadas y potentes, como los centros comerciales de Los Arcos y la estación de Plaza de Armas, están en proceso de reforma. También el centro de Nervión Plaza buscará nuevos alicientes para competir. ¿Se comerán los nuevos peces gordos a los más pequeños?

Vuelvo a poner ejemplos de Asia, en cuyas principales ciudades llevan un cuarto de siglo de adelanto. Allí se puede intuir lo que sucederá aquí en las próximas décadas. Aunque también encontramos ejemplos en grandes ciudades europeas y americanas. Hasta ahora, todos los centros comerciales de Sevilla eran iguales. Repetían un esquema de tiendas y firmas como las que hay en la calle Tetuán, a las que se añadía una zona de restauración (es decir, un McDonald’s o un Burger King, y otros así), y algunas salas de multicine (en algunos casos). En esas condiciones, el único valor añadido era la proximidad geográfica: voy al que está más cerca de mi casa.

Sin embargo, puede existir una oferta de centros comerciales plural y diferenciada, basada en lo temático. Entre los que he visto recientemente, me sorprendieron los de Macao, la ex colonia portuguesa, que actualmente es una autonomía controlada por China, de la que será provincia en 2049. Macao se ha especializado en el juego y los casinos. Es como una sucursal de Las Vegas, a la que acuden millonarios, nuevos ricos y ludópatas de China, Hong Kong, Japón y otros países de Asia. Pero, aparte de eso (que intentaron en Madrid y no cuajó), lo que llama la atención son los centros comerciales temáticos en los que integran sus casinos. Sobre todos dos: uno que recrea París, con una Torre Eiffel incluida, y otro que imita a Venecia, en el que incluso hay canales y góndolas.

En esos centros comerciales de lujo están las principales marcas del mundo, entre ellas algunas de origen español, como Loewe, o de Inditex, como Zara o Massimo Dutti, y todas las multinacionales deportivas, empezando por Nike y Adidas. Lo temático funciona como gancho. Es un modelo que en Sevilla probablemente se implantará. Es la única opción de supervivencia para algunos centros comerciales que ya afrontan una etapa de vacas flacas.

José Joaquín León