EN Zaragoza están presumiendo bastante porque han adelantado a Sevilla en el número de habitantes. Un sorpasso, que diría Pablo Iglesias. Según el ranking de los padrones, a 1 de enero de 2023, en Zaragoza vivían 694.109 habitantes, mientras que Sevilla se ha quedado con 693.229. Sevilla ha crecido en 2.014 vecinos, pero la capital aragonesa ha ganado 9.423. Y hay que precisar (sin el menor atisbo de xenofobia) que la mayor parte del crecimiento zaragozano es de extranjeros, pues ha sumado en un año 11.254 personas procedentes de otros países. Sea como sea, Zaragoza pasa a ser la cuarta ciudad de España en habitantes, por detrás de Madrid, Barcelona y Valencia, y por delante de Sevilla.

Los datos han sido difundidos después de publicarse en la revista Cifras 2023, que edita el Ayuntamiento de Zaragoza. Es probable que la capital aragonesa se esté beneficiando de su ubicación logística, entre Madrid y Barcelona, equidistante por AVE con las dos principales ciudades españolas, y receptiva para la inmigración, como lo confirma que allí viven 23.211 rumanos, 9.827 nicaragüenses, 7.895 colombianos, 7.010 marroquíes y 5.472 chinos.

Si consideramos que España cuenta con cuatro clubes en la Liga de Campeones (aunque Javier Tebas dice que son demasiados) resultaría que las cuatro ciudades de Liga de Campeones serían Madrid, Barcelona, Valencia y Zaragoza. Sin embargo, la comparación es irresistible, pues Sevilla tiene dos clubes en Primera y Zaragoza uno en Segunda. Algo parecido le ocurre Málaga, cuyo lugar en el ranking de habitantes no se corresponde con sus penurias futbolísticas. Se nota que el éxito del fútbol no depende del padrón, sino de marcar goles o no.

Hay otros consuelos. El área metropolitana de Sevilla es mucho más importante y está más poblada que la de Zaragoza. Lo mismo ocurre en Madrid y en Barcelona, donde gran parte de las personas que viven en los entornos metropolitanos trabajan y acuden cada día a las capitales. Por eso, a Sevilla hay que considerarla siempre en términos metropolitanos. Y entender que, si quieren ganar habitantes en la capital, hay que favorecer la residencia de los vecinos en los barrios céntricos. Porque los turistas que se alojan en los hoteles no cuentan en el padrón. Y para irse a vivir a un barrio que está más cerca de Alcalá de Guadaíra o de Dos Hermanas que de la plaza Nueva, la gente prefiere irse directamente a esos municipios; o a otros como Mairena del Aljarafe y San Juan de Aznalfarache, que tienen paradas de metro. Sevilla está planificada para perder habitantes.

José Joaquín León