SE cumplió el objetivo en la tarde del 19 de marzo. Con 50 puntos en su casillero, el Cádiz seguirá una temporada más en Segunda A, si no asciende a Primera. En Gerona, ante un rival que no había perdido ningún partido en su feudo de Montilivi, el Cádiz consiguió una victoria muy sufrida. Como en otras ocasiones, desde que está Álvaro Cervera, se salvó por la fe cuando llegaron las dudas. Antes había marcado dos goles como dos soles, con los que demostró que este equipo puede aspirar a todo si mantienen el nivel de compromiso y la ilusión.

DEMASIADOS apuros para vencer al Rayo Vallecano. Demasiados porque este partido debió quedar resuelto antes del descanso. En la primera parte el Cádiz dispuso de ocasiones para haber conseguido al menos dos o tres goles. No fue así, y casi se estropea el resultado, en una segunda parte conformista. Otro rival posiblemente hubiera puntuado si le juegan así. Pero este Rayo Vallecano es una sombra de lo que fue. Como no reaccione a tiempo, pueden acabar en el pozo de la Segunda B. Por el contrario, el Cádiz ya sólo mira hacia arriba. Bueno, hacia las eliminatorias de ascenso, porque Levante y el Girona ya están casi ascendidos.

OTRA vez el Oviedo le provoca un disgusto al Cádiz. Es la bestia negra. Nos dejó un año en Segunda B, cuando el Cádiz ya se relamía con el ascenso. En el reencuentro en la Liga 1/2/3, ganó en Carranza por 0-2, casi sin despeinarse. Y ayer fueron capaces de remontar un partido, cuando el Cádiz vencía con un 0-1 que lo hubiera consolidado en el tercer puesto como un firme candidato a disputar las eliminatorias de ascenso a Primera. Desde luego si repiten los errores de ayer será difícil que lo consigan. La lesión de Salvi, a la media hora de partido, resultó mortal, porque Álvaro Cervera se equivocó gravemente y descompuso al Cádiz cuando tenía el partido controlado.

GRAN domingo de Carnaval en Soria: el Cádiz consiguió un 0-3. Fue un marcador abultado, gracias a que todo le salió bien al Cádiz en los momentos de dudas. Vimos muchos aciertos, pero también errores, que no costaron un disgusto por la falta de puntería del Numancia cuando encerró al Cádiz en su área, a pesar de que jugaba en inferioridad. Los dos goles que rompieron el partido fueron marcados por Imaz y Aketxe, dos refuerzos de invierno.

TARDE malange y grisácea que pareció contagiar al Cádiz. No se le vio esta vez como un equipo con recursos para estar arriba. Pareció como si después de lo ocurrido en Getafe (donde le escamotearon un punto para afirmarse), no se lo terminaran de creer. Hay que ser realistas para ver que el objetivo de la fase de ascenso será muy difícil. El Levante ya es inalcanzable y el Girona va en busca de ese camino. El Cádiz aún está en el pelotón de los que pelean detrás por los puestos de promoción. Y, si miramos a los de abajo, el puntito de ayer no está mal. Aunque sabemos que no fue bueno para aumentar las ilusiones.