EN vísperas de elecciones abundan las promesas y las inauguraciones. La apertura de la Casa del Carnaval (antes llamado Museo del Carnaval) es presentada por el equipo de gobierno de Kichi como un gran éxito. Ciertamente, es de lo poco visible que pueden mostrar a los gaditanos, después de ocho años en el Ayuntamiento. También es verdad que Teófila Martínez, en sus años de alcaldesa, lo intentó y no pudo inaugurar un Museo del Carnaval, entre otras cuestiones porque se equivocaron con el proyecto fallido en la plaza de la Reina. Las obras en el antiguo Palacio de Recaño permiten intuir que el museo (o lo que sea), se convertirá próximamente en realidad. Pero aún es un proyecto pendiente de concreciones.

EN Cádiz y su provincia gustan mucho los eventos. Así sean los fijos, como el GP de Motos que se celebró la pasada semana en Jerez; o los discontinuos, como el aún reciente Congreso de la Lengua Española. Algunos lo compararon (y fue una exageración) con los actos del Bicentenario de la Constitución de 1812. Quizás porque en 2012, y en los años anteriores, la ciudad había acogido importantes eventos, entre ellos una Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de Iberoamérica. El rey Felipe VI, que entonces era príncipe de Asturias, acudió para diversos actos, aunque no tocó el cajón en ninguno. Y también vino su padre, Juan Carlos I, que entonces era el Rey de España y se desplazaba sin críticas por su país. Así como la reina doña Sofía, que inauguró interesantes exposiciones.

EL GP de España de Motociclismo, que se ha disputado en Jerez, no ha aportado ningún valor añadido para el turismo. En el puente del Primero de Mayo los hoteles se hubieran llenado con motos y sin motos. Es cierto que han venido motoristas, que en otras circunstancias quizá hubieran viajado a diferentes destinos, o se hubieran quedado en sus ciudades. Pero las playas de Cádiz, en estas fechas, ya tienen tirón turístico. Y todos los conductores conocen los múltiples inconvenientes de tráfico y las molestias que provocan las motos de Jerez. Por lo que una parte de los posibles desplazados a Cádiz han elegido otros destinos de playa, como las costas de Málaga o Huelva, donde no se han encontrado esos problemas.

EL alcalde de Cádiz dijo que no se presentaría a las elecciones municipales de 2023. Sin embargo, José María González Santos aparece en la lista de su coalición, cerrándola en el puesto 27. Algunos me dirán, con razón, que no es lo mismo que presentarse en el puesto 1 para alcalde. No es lo mismo, claro, pero incluso existen argucias legales para que un concejal situado en el puesto 27 pudiera entrar en el Ayuntamiento a lo largo de la legislatura. Y aunque no se llegue a eso, es un certificado de lo que propone esa lista: continuismo del kichismo. Con otro candidato al frente, pero con objetivos comunes, y con el patriarca de la tribu velando por la candidatura.

AL no venir a Cádiz para la gala de los premios Max, se ha recordado que el ministro de Cultura, Miquel Iceta, tampoco acudió para el Congreso de la Lengua Española. Es mucho más grave esto. Al Congreso de la Lengua Española vino el Rey (a tocar el cajón, según parece), pero no el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ni el ministro de Cultura, Miquel Iceta. Se ha demostrado que la lengua española le importa poco al Gobierno sanchista y populista. A pesar de las excusas que han dado, todo hace suponer que la ausencia del ministro de Cultura en el Congreso de la Lengua Española no fue por casualidad, sino porque le molestaba participar.