ENTRE los falsos proyectos industriales de la Bahía de Cádiz, había otro que se veía venir: el de los terrenos de Delphi. Allí se iba a instalar la empresa Ebion, que pagaría 5,4 millones de euros para construir una planta fotovoltaica y otra para depurar aguas residuales. Un proyecto ecológico y de lo más verde, políticamente correctísimo, que daría empleo a unos 200 trabajadores. También se anunció que la inversión total llegaría a 30 millones de euros y podría incluir uso hotelero, restauración y una electrolinera para coches eléctricos. Una inversión tan maravillosa que hasta el entonces vicepresidente de la Junta, Manuel Jiménez Barrios, asumió que se debía retirar Lógica, el nuevo proyecto industrial que sustituyó al del polígono de las Aletas, otro comecocos que no cuajó.

EN las necrológicas por el fallecimiento de Pepe Oneto se ha resaltado su aportación al periodismo democrático en España. Fue un personaje importante en los años de la Transición, porque supo encauzar el protagonismo de las revistas políticas en España, para crear una opinión justa y proclive al consenso. Esto hoy no se entiende. Por eso, es justo elogiar la aportación del periodista nacido en San Fernando. Y no se entiende porque aquellas revistas políticas no existen, y las redes sociales están marcadas por intereses partidistas y frikis sin criterio. La Transición se entiende mejor consultando antiguas revistas, como Cambio 16 y Tiempo, de las que fue director Pepe Oneto desde 1975 a 1996, más de 20 años entre ambas.

LA instalación del alumbrado de Navidad en Cádiz comenzó ayer, día de la Virgen del Rosario, fiesta local. Después criticarán a El Corte Inglés porque abre todos los domingos y festivos. Los operarios de la empresa Porgesa, en los próximos días, procederán a colocar en la ciudad 360 arcos luminosos, con hasta 21 motivos navideños, según una nota de prensa que difundió el Ayuntamiento. El objetivo es que esté a punto para las fechas señaladas, y no nos encontremos que el día de los Reyes Magos les queda poco para terminar el montaje. Nuestro alcalde Kichi se pasa o no llega. Le valoro sus buenas intenciones luminosas, pero empezar a montarlo el día del Rosario es prematuro.

LA ciudad de Cádiz celebra hoy la fiesta de la Virgen del Rosario, que es su Patrona, como lo es de otros municipios de la provincia, entre diversos lugares de Andalucía, España y la Humanidad. No es por casualidad, sino por la gran devoción que a lo largo de los siglos ha existido por el Santo Rosario, y por la propagación de la devoción en la que los dominicos siempre tuvieron un gran papel. Y lo siguen teniendo, porque en Cádiz el prior, fray Pascual Saturio vale por una comunidad de frailes completa, y no sólo mantiene y propaga la devoción a la Virgen del Rosario, sino que ha tapado muchos agujeros negros. Con discreción y señorío, por cierto. Es un día de fiesta y celebración, pero desde 2015, cuando Kichi fue elegido alcalde, tenemos una polémica con la función del Voto que ya debería terminar.

LAS majorettes que se están preparando para salir en la cabalgata de los Reyes Magos de Cádiz de 2020 no son como las de Montpellier. Aquellas jóvenes francesas provocaron admiración, envidia o indignación en el Cádiz tardofranquista. Las majorettes de Montpellier ya vinieron en el mayo del 68, precisamente, cuando en Cádiz había Fiestas Típicas. Eran como un anticipo liberaloide, cuando ya se hablaba de apertura. Era una concesión del régimen arcaico, que pasaba del cinturón de castidad, cerrado con las siete llaves del cruzado, a permitir la minifalda escueta que desafiaba a las ráfagas del viento de levante. Era el pecado, pero venial y perdonable. Los pecados más mortales todavía estaban por llegar.