EN la polémica por los cambios de nombres de las calles, la opinión de los vecinos es importante. Son los afectados. Pues si te cambian el nombre de la calle,…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
SEVILLANOS y sevillanas, titulares de casetas y de carruajes, votantes todos: la Feria ha terminado. Aquí había más gente que en la plaza de Oriente. Aunque no todos habían llegado en autobuses, porque a ciertas horas parecía imposible. Ahora estamos en la semana después. Ahora estamos en la semana de…
ETA fue fundada en 1959, cometió crímenes durante el franquismo, los siguió perpetrando en la democracia, anunció el cese de su actividad armada en 2011, pero no se disolvió oficialmente hasta 2018. ETA duró casi 60 años; es decir, 20 años más que el franquismo, y de ellos más de…
UN sector de la izquierda española, el más extremista, cree que todavía estamos en los años de la Segunda Guerra Mundial y la Guerra Fría. Presumen de progresistas, y es una ironía, porque no miran al futuro, sino que viven anclados en el pasado y manipulando la memoria a su antojo. Es lamentable que presenten el apoyo a la OTAN en el conflicto entre Rusia y Ucrania como si el Gobierno español (¡ojo, en el que participan los suyos!) fuera a enviar una División Azul del siglo XXI. No es eso, no es eso. Ni tampoco la Rusia de Putin es la misma que la URSS de Lenin y Stalin. Aunque los afanes imperialistas de Putin tengan el mismo objetivo que el comunismo soviético, que invadió y se anexionó los países de su entorno con sangrientas dictaduras.
NO sé qué más debe ocurrir para que le devuelvan al estadio Carranza su nombre y le supriman el de Nuevo Mirandilla. Lo escribí el 8 de octubre de 2021: ese estadio está gafado. Desde que le cambiaron el nombre, han pasado más de cinco meses y el Cádiz no ha ganado ni un partido. Ha perdido puntos en trágicas circunstancias. Fue terrible lo ocurrido en la noche del pasado martes. Parecía que el Cádiz rompería el maleficio, con el cambio de entrenador y la llegada de Sergio González, pero el Espanyol empató en el minuto 96, en una jugada tontísima, en un despiste colosal. ¿Y no parecía cosa de brujas? Es el gafe, es la maldición. El Nuevo Mirandilla le ha dado al Cádiz la puntilla.
AL nuevo alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, se le debe reconocer que ha empezado con ganas. O será que Juan Espadas, en los últimos meses, funcionaba al ralentí, asumiendo que sus votos están ahora en las ocho provincias andaluzas y no sólo en la capital sevillana. El alcalde Muñoz se ha venido arriba en Fitur, no en vano el turismo es una de sus especialidades. En el mes de enero, en plena cuesta, con todo subiendo (desde el contagio de ómicron al precio de la luz o el gas) es muy propio de los alcaldes que se dediquen a fiturear, a la espera de gripalizar la pandemia y de optimizar las potencialidades locales. Ahora los políticos hablan como si estuviéramos descubriendo América de nuevo, a base de perogrulladas bien vestidas.
AL final resultará que el COAC (Concurso Oficial de Agrupaciones carnavalescas) tiene la culpa de que hayan reconvertido el Carnaval de Cádiz en las Fiestas Típicas Gaditanas de 2022. Algunos dicen que hubiera sido imposible celebrarlo en estos días de enero. ¿Se imaginan ustedes el Gran Teatro Falla en las noches de Ómicron? Esos coros diezmados y reconvertidos en comparsas o chirigotas, por falta de componentes. Esas comparsas y chirigotas reconvertidas en cuartetos por falta de componentes. Esos cuartetos reconvertidos en romanceros por falta de componentes… Y el patio de butacas y el gallinero con media entrada, y el palco municipal, y… Bueno, no sigo. En estos días creo que hay algunos espectáculos. Aún quedan supervivientes.
A la Pandemia la quieren llamar la Endemia. Lo dijo Pedro Sánchez, aunque matizó que “no será de un día para otro”. No va a ser como la burocracia exprés de Juanma Moreno en la Junta. Sobre estos nombres de la Pandemia y la Endemia, es raro que no hayan protestado las feministas, ya que a las cosas malas les ponen nombre de mujer. ¿No podrían ser el Pandemio y el Endemio, que suenan a golfantes? A la Pandemia le quieren cambiar el nombre y llamarla la Endemia para reinventarla. Para darle una segunda oportunidad, y que a la gente no le parezca tan hija de mala madre (otro ejemplo de machismo atroz); y que no le vuelvan a echar la culpa a las manifestaciones del 8-M, cuando después se ha manifestado todo el que ha querido y con megáfonos, y hasta han salido los reyes magos en cabalgatas. La Endemia estaría mejor maquillada que la Pandemia, sería más presentable en la harta sociedad.