LA globalización nos puede llevar a adoptar los usos y las costumbres de otros países. Es lo que está ocurriendo con las fiestas de Todos los Santos y los Fieles Difuntos. Ya no tiene sentido lamentarnos por nuestros Tosantos gaditanos de toda la vida. Este año, en algún puesto de los mercados, se han visto exornos que evocaban al Halloween norteamericano, que ya está asumido, y al Día de los Muertos mexicano, otra variante que está cobrando fuerza. Y, como es una fiesta de origen religioso, quizás ha llegado el momento de que la Santa Madre Iglesia haga lo mismo que con otras fiestas, a las que cristianizó y dio un sentido divino.

LA semana pasada fueron elegidos y proclamados públicamente los tres Reyes Magos, el Cartero Real y la Estrella de Oriente para la cabalgata del 5 de enero de 2026 en Cádiz. Los monarcas orientales serán el periodista Ignacio Moreno Bustamante, el comercial Andrés Delfín y el mago Juan Romero Rubiales, mientras que la Cartería quedará a cargo del empresario Álvaro Sánchez Huerta, y la Estrella que abre el cortejo de la ilusión infantil será la matrona Mimi Melero. Hasta ahí todo está dentro de las costumbres reglamentarias que son habituales. Sin embargo, hay una duda que se comenta desde hace tiempo, y que no se aborda: ¿es necesario publicar los nombres de todos los candidatos que presentan?

LA intención de crear un partido provincial en Cádiz para las elecciones autonómicas ha sido acogida con escepticismo. Es normal, porque ese partido está impulsado por el alcalde de La Línea, Juan Franco, y su camarlengo político, Javier Vidal, vicepresidente de la Diputación, tras el acuerdo de gobierno con el PP. A partir de una fórmula exitosa en La Línea (donde disfrutan de una mayoría absolutista casi total, ganada en las urnas) quieren extender el fenómeno al resto de la provincia. Para lo que cuentan con otros alcaldes de poblaciones como Los Barrios, Chipiona y Benaocaz, que ahora son independientes. Del proyecto se dijo que se denominaría Cádiz 100x100, pero como sonaba a demasiado gaditano, se han bautizado como 100x100 Unidos.

AUNQUE los cadistas más rancios creen que el Cádiz CF es el equipo de la ciudad llamada Cádiz, la realidad es diferente. Es el equipo de la capital, sí, pero también de los municipios del entorno de la Bahía. Esto se puede comprobar fácilmente después de un partido. Por ejemplo, el pasado lunes por la noche. A la hora de terminar el Cádiz-Burgos, pasadas las 22:30 horas, un lunes de octubre apenas hay tráfico. Sin embargo, esa noche había circulación intensa en las salidas de Cádiz por los dos puentes y por la carretera de Cortadura. Es decir, que cientos de personas, tras presenciar el partido, se trasladaban a sus domicilios, mayormente de San Fernando, Chiclana, Puerto Real, El Puerto de Santa María, Rota e incluso Jerez, aunque también de otros como Medina Sidonia, Conil o Vejer.

AL principio de la democracia parlamentaria, cuando los políticos se insultaban menos, concedían a los gobernantes cien días de gracia. Tres meses y pico en los que se les permitía aterrizar, antes de ejercer la oposición. Sin embargo, en los tiempos de la democracia atrabiliaria, no se le concede a los gobernantes ni cien segundos de gracia. En menos de dos minutos, ya estaba la oposición andaluza criticando al flamante consejero de Sanidad, Antonio Sanz, por no haber solucionado el problema del cáncer de mama. Y en Cádiz ya se le estaba reclamando la inauguración del nuevo hospital de Puntales. Se ha dicho también que lo han puesto para salvarle la cabeza a Juanma Moreno. Nadie espera que lo pongan para que se lo cargue, pero también para que el SAS funcione mejor.