EL comercio gaditano, como todos, está sujeto a las leyes de las ofertas y las demandas. Este es el principio básico a tener en cuenta. A propósito de la iluminación…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
VER a la Virgen sevillana de Montserrat, con la montaña catalana de Montserrat al fondo, nos aporta la verdadera dimensión de lo que es una procesión extraordinaria. Y ver a la Virgen sevillana en un pequeño paso de palio (cedido por la Hermandad de Monte-Sión) en el santuario, debajo de…
PUEDE considerarse como una gran noticia que tengamos noticias de Extremadura. La pobrecita Extremadura nunca aparecía en los informativos nacionales, excepto que ocurriera algún suceso grave, o que el hermanísimo del presidente del Gobierno se pase de listo. Sin embargo, ahora tiene importancia. El próximo domingo, día 21, han convocado…

LO peor no fue el resultado, el empate en casa ante el colista de Tarragona, sino la vergonzosa segunda parte que jugó el Cádiz. Está en un momento muy difícil, porque necesita un cambio de rumbo y de actitudes. Era un partido fácil para ganar y bien encarrilado, con un gol de penalti que marcó Álex. Perro se volvió a ver que el Cádiz ha perdido sus virtudes. Ahora la defensa es un coladero. Ahora los futbolistas amarillos no son intensos. Ahora no se sabe si están desmoralizados o les importa poco el futuro de su equipo. Ahora parece que los factores extradeportivos se han contagiado.
El entrenador Álvaro Cervera hizo cambios en busca de un revulsivo. Jugó de central Edu Ramos, ya que el fichado Sergio Sánchez llegó tarde y en baja forma, y están lesionados Servando y Marcos Mauro. También volvía a la titularidad Aketxe, que empezó bien hasta que se fue disipando. Lekic tuvo una oportunidad y demostró que no es el delantero que necesita el Cádiz. Mientras que Agra centraba por la derecha, pero nada se pudo rematar como es debido.
EN pleno berenjenal catalán, ha muerto Montserrat Caballé. De ella se está diciendo que fue la gran soprano de su tiempo, la única que le disputó la primacía de ser la mejor del siglo XX a María Callas. Ella también popularizó la ópera entre unas clases sociales ajenas a esa burguesía catalana que llenaba el Liceu en los tiempos de Franco, cuando debutó. Ella tenía una voz irrepetible, que era como de claridad y soledad sonora, se podría seguir parafraseando a San Juan de la Cruz, como un cántico que llegaba de cielos muy remotos. Y ella fue un ejemplo para la Cataluña de hoy, porque era catalana y española. Nunca se avergonzó.
PARA los ateos compulsivos y los masones separar la vida pública de las tradiciones católicas es un objetivo desde tiempo inmemorial. No es verdad que el poder civil participe en procesiones y actos religiosos como una herencia de Franco, aunque es cierto que en aquellos años se fomentó desde el poder. Unas tradiciones tienen siglos de antigüedad y otras no. Cuando quieren imponer sus ideas, se inventan una fake history. En Cádiz esto se nota en las relaciones municipales con la Patrona de la Ciudad, la Virgen del Rosario, y con el Regidor Perpetuo, el Nazareno de Cádiz. Al alcalde González se le ha acusado de poner una vela a Dios y otra al diablo.
TAMBIÉN es mala suerte inaugurar el congreso de las aerolíneas de low cost en Sevilla justamente cuando se está hablando de los barquinazos de algunas empresas de low cost, en sectores tan florecientes y solicitados como las clínicas dentales y las peluquerías. Pero no hay que confundir el atún con el betún. Como en pasa en tantas actividades, todo depende. También es verdad que en el centro comercial de Torre Sevilla se ha inaugurado el primer Primark, esa tienda irlandesa que tanta ansiedad ha creado, y el otro Ikea, esa tienda sueca que tan entretenida resulta a la hora de montar. Nos guste o no, son los años felices del low cost, que estará de moda mientras la burbuja aguante.
EL barrio de Santa María tenía fama de ser el más rojo de Cádiz. La leyenda venía desde la II República y la Guerra Civil. Fue uno de los pocos lugares de la ciudad donde hubo resistencia visible el 18 de julio de 1936, con tiros en las calles y una represión posterior. Por otra parte, tristemente, algunos miembros del rojerío radical habían incendiado en 1932 y en marzo de 1936 (por consiguiente, mientras gobernaban los republicanos, antes del 18 de julio) las tres iglesias del barrio: la Merced, Santo Domingo y Santa María. En esos incendios, ardió por completo la Merced (con una pérdida irreparable de su patrimonio artístico), se quemó la primera imagen de la Virgen del Rosario (y también la segunda), así como estuvieron a punto de cargarse por completo la imagen del Nazareno, y se perdió la Virgen de los Dolores.