EN la polémica por los cambios de nombres de las calles, la opinión de los vecinos es importante. Son los afectados. Pues si te cambian el nombre de la calle,…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
SEVILLANOS y sevillanas, titulares de casetas y de carruajes, votantes todos: la Feria ha terminado. Aquí había más gente que en la plaza de Oriente. Aunque no todos habían llegado en autobuses, porque a ciertas horas parecía imposible. Ahora estamos en la semana después. Ahora estamos en la semana de…
ETA fue fundada en 1959, cometió crímenes durante el franquismo, los siguió perpetrando en la democracia, anunció el cese de su actividad armada en 2011, pero no se disolvió oficialmente hasta 2018. ETA duró casi 60 años; es decir, 20 años más que el franquismo, y de ellos más de…
HEMOS leído en la prensa (concretamente, en un informe de Joaquín Benítez publicado en el Diario) que en Navantia de Cádiz fueron reparados 39 cruceros en 2023, de los que 12 eran de grandes dimensiones. Eso demuestra la especialización del astillero gaditano, que no hace tantos años languidecía sin carga de trabajo. En diciembre, se publicó que Dragados Offshore necesita más suelo para su planta de Puerto Real. Le pidieron a Teófila Martínez, como presidenta de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz, 84.803 metros cuadrados para ampliar sus instalaciones. ¡Qué envidia para Manuel Vizcaíno! ¿Cuántos estadios nuevos podría construir en ese suelo, o en los terrenos de Delphi que ha inscrito el Cádiz CF como propios?
SON malos tiempos para la lírica. Cierran librerías de proximidad y pocos leen poesía. Así pasa lo que pasa. En las paredes han aparecido pintadas contra los turistas. Estaríamos locos si le diéramos altavoz a todo lo que un carajote puede escribir en una pared, o incluso en las redes sociales, que puede ser parecido a un muro, y no el de Berlín precisamente. Pero es sintomático que prolifere una corriente que defiende una Sevilla sin turistas. Es lo contrario que se decía hace un siglo, cuando el apócrifo Abel Infanzón, creatura del poeta sevillano Antonio Machado, escribió: “¡Oh maravilla, Sevilla sin sevillanos, la gran Sevilla!”. Sobre eso se ha debatido en el último siglo. También sobre la relación de Luis Cernuda con Sevilla. Pero, como ya pocos leen poesía, se ha llegado a la conclusión contraria. Es mejor una Sevilla para los sevillanos y sin forasteros. Lo mismo que dice Junts en Cataluña.
NO es fácil entender a Junts, ya que no se entienden ni ellos mismos. Como partido se constituyó en 2020, aunque había sido registrado en 2018. Tienen continuas broncas internas. Muchos proceden de la antigua Convergencia de Jordi Pujol, que antaño estaba coaligada con Unió Democrática de Duran i Lleida. Ambos partidos se extinguieron por corrupción. Si Pedro Sánchez no los hubiera resucitado, ahora Junts estaría al borde de la extinción, y con Puigdemont asediado para la retirada política, ya que obtuvieron unos pésimos resultados el 23-J. No ganaron en ninguna provincia catalana y en Barcelona fueron quintos, tras PSC, Sumar, PP y ERC (por este orden).
DESPUÉS de Rafael Alberti y José María Pemán, que eran de otra generación anterior, el escritor gaditano más importante del siglo XX es Fernando Quiñones. Desde el pasado noviembre, y hasta diciembre de 2024, se conmemora un año de homenajes a Quiñones, al cumplirse los 25 años de su fallecimiento. Debería servir para ponerlo en su pedestal, que es el de un gran escritor. Quizás injustamente minimizado en su posteridad por diversas cuestiones, entre ellas que se le suele mencionar como escritor chiclanero o escritor gaditano; y, siendo verdad, se le queda corto, porque simplemente era escritor. Tampoco le beneficia su campechanía, y que en Cádiz lo conocía todo el mundo. Una cercanía que parece impropia de los genios. Pues se supone que un genio debe estar oculto en la lámpara (o donde sea) y salir poco.
PARA ser una gran ciudad lo que necesita Sevilla no es llegar a los 700.000 habitantes. Esa es una falacia impulsada desde el Ayuntamiento por los alcaldes (la disquisición viene de antiguo), porque les interesa para obtener más beneficios en los ingresos y garantizarse más concejales. Pero lo que distingue a una gran ciudad no es sólo el número de vecinos, que se deben valorar en el área metropolitana, y en tal caso Sevilla contaría con alrededor de un millón. Lo que distingue a una gran ciudad es su capacidad para ejercer una capitalidad fuerte, sobre todo en lo económico. Y para ello necesita unas infraestructuras básicas de las que todavía carece.