SE les debe reconocer a los dirigentes de la Sepi y Navantia que van a hacer una reconversión con arte en los astilleros de la Bahía. En la propuesta para el futuro van a reducir los 1.600 puestos de trabajo fijos existentes a unos 1.300. Se pierden 300 empleos. Pero va a pasar prácticamente desapercibido porque se darán tres condiciones estupendas. Una es que la plantilla nueva será de más calidad y más rejuvenecida (lo que significa que la actual es de menos calidad y más vieja). La segunda es que van a prejubilar, a los 61 años, a casi todos los sindicalistas actuales y a los que más protestan, en general (a diferencia de otros tiempos, cuando hubo prejubilaciones de cincuentañeros). Y la tercera es que gobierna el PSOE de Pedro Sánchez, con el auxilio de Podemos, por lo que ya no es igual que cuando gobernaba Rajoy. La izquierda hace las reconversiones y la derecha se lleva las ovaciones.

CUANDO gobernaba Mariano Rajoy, ese registrador de la propiedad, el PSOE exigía la inmediata supresión del peaje de la autopista, incluso pagando un rescate si preciso fuere, porque no se podía aguantar que esta provincia siguiera tan castigada como ninguna otra del país, incomunicada con el mundo, etcétera. Por el contrario, cuando gobierna Pedro Sánchez (del mismo PSOE), el peaje costará 7,40 euros en cada viaje a partir del próximo mes de enero, con una subida de 10 céntimos más, y eso es lo que hay. Porque dicen lo mismo que los otros del PP: que a final de 2019 caduca la concesión y no será renovada, y que cuesta muy caro rescatarlo, por lo que es preferible tener paciencia.

EN Cádiz hay dos puentes: el nuevo y el viejo. Según los informes del Ministerio de Fomento, el puente viejo está viejísimo. Es una de las infraestructuras españolas que necesita más obras de mantenimiento. Es decir, Cádiz necesitaría que el puente viejo (o de Carranza) lo volvieran a construir nuevo. Si hubiera un alcalde como los de antes, pediría al ministro Ábalos (que es del PSOE de Sánchez), que construya otro puente para la Bahía. Y la gente hablaría del puente de Kichi. Y él podría poner imágenes bonitas, captadas con drones, en las pantallas LED que todavía funcionan para las farmacias de guardia y el tiempo. Pero pierdan las esperanzas. No tenemos un alcalde con amor a los puentes, y eso se le nota.

AL empezar, se debe recordar que todavía no hay un acuerdo de gobierno para la Junta de Andalucía. Por consiguiente, no podemos vender ningún oso antes de cazarlo. En estos momentos, parece que lo más probable sería un gobierno andaluz de coalición de PP y Ciudadanos, con apoyo de Vox sólo para las mayorías parlamentarias. Puede haber otras alternativas, que a día de hoy son improbables, porque pasan por PSOE y Ciudadanos, dándose el caso de que este último partido dijo públicamente (incluso en los dos debates televisados) que no pactarían con el PSOE y que apoyarían un cambio. Por lo que todo el mundo sabe lo que votó y no pueden engañar a sus votantes. Pase lo que pase, algunos están acongojados.

HOY es la fiesta de la Inmaculada Concepción, en cuya devoción han profesado miles de mujeres, a lo largo del tiempo, en la orden de las franciscanas concepcionistas descalzas. En Cádiz están celebrando sus 350 años en el convento que se conoce como el de la calle Feduchy, pero cuyo templo del monasterio de Santa María de la Piedad tiene acceso por la calle Montañés. Están, pues, en pleno centro de la ciudad desde hace tres siglos y medio. Sin embargo, la primera fundación de la orden en Cádiz no fue este convento, sino el erigido en 1527 bajo la advocación de Nuestra Señora de la Concepción, junto a la ermita de Santa María del Arrabal. Un convento que está tristemente cerrado por la desidia de esta ciudad, a falta de menos de nueve años para cumplir  medio milenio.