EN la polémica por los cambios de nombres de las calles, la opinión de los vecinos es importante. Son los afectados. Pues si te cambian el nombre de la calle,…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
AL ministro de Transportes, Óscar Puente, lo tienen ya en el punto de mira la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Sevilla. Es un ministro peculiar, con una parte buena y otra mala. La buena es que suele decir lo que piensa y miente menos que otros compañeros de…
ETA fue fundada en 1959, cometió crímenes durante el franquismo, los siguió perpetrando en la democracia, anunció el cese de su actividad armada en 2011, pero no se disolvió oficialmente hasta 2018. ETA duró casi 60 años; es decir, 20 años más que el franquismo, y de ellos más de…
LA gente es así, incluidos los políticos que hablan de la gente. Superado el momento heavy de la novelería, están confundiendo el Lagoh con el mercadillo del Charco de la Pava. Parece que la elogiada inversión del grupo Lar, ese centro comercial que fue considerado el más grande de España (ahora dicen que es el segundo de Andalucía, tras el Nevada de Granada), es equivalente a una venta ambulante por la cara que han montado en Palmas Altas, a la vera de la Ciudad de la Justicia y las tres mil viviendas que construirán en el nuevo barrio de Isla Natura. Ahora se han dado cuenta de que aquello va camino del caos. Y yo pregunto: ¿son tontos o qué? ¿Quién concedió la licencia de apertura? Algunos tienen amnesia histórica. Se acuerdan de lo que pasó hace 80 años y se olvidan de lo que dijeron ellos mismos hace 80 días.
EL Cádiz es como esos ciclistas que se escapan al principio de una etapa montañosa, y que sueñan con la gloria cuando todavía están muy lejos de la meta. Es la hora de soñar y de esperar que el equipo no se desfonde. También de corregir las carencias que se le notan. Sin embargo, los éxitos no están llegando por casualidad, sino por la solidez de un bloque en el que ninguno se siente figura y en el que todos luchan con el máximo sacrificio. Los envidiosos ya no saben qué decir. Ahora hablan de la efectividad, como si fuera algo negativo, cuando es una de las habilidades del fútbol. Puede que sea pintoresco ganar un partido con una posesión del 28%. Pero el Cádiz tuvo tres ocasiones de gol, y marcó dos. Las Palmas no creó ninguna jugada clara de peligro en todo el partido. El resultado es justo.
EL Cádiz interior o del arciprestazgo de Intramuros (la ciudad histórica, en general) no está preparado para el tráfico de vehículos. Tampoco para los carriles bicis, que forman parte del tráfico. Y no puede funcionar como una gran bolsa de aparcamientos, en todo su perímetro, porque su espacio es muy limitado. La culpa de eso no la tiene Kichi, ni la tuvo Teófila, ni antes Carlos Díaz, ni siquiera Emilio Beltrami, Jerónimo Almagro, José León de Carranza y todos los anteriores. La culpa la tiene Cádiz, que es como es. En ese tramo funciona como una isla. En realidad, es una fortificación amurallada, que debería pertenecer al Patrimonio de la Humanidad. La movilidad, en el anillo periférico, siempre ha estado mal, aunque ahora se ha quedado peor; es decir, insoportable.
EL pasado miércoles se cumplió el cincuentenario del Parque Nacional de Doñana. Fue creado el 16 de octubre de 1969 por un decreto del Gobierno franquista, y afectaba a una extensión menor a la actual, que en parte pertenecía al Ministerio de Educación y Ciencia y en parte era propiedad privada. Esto es oportuno recordarlo, porque el ecologismo no es de derechas ni de izquierdas, sino que es o no es. Se conocen casos de gobiernos comunistas que han cometido barrabasadas y de gobiernos fascistas que también, y a la inversa. Pero, como pasa con tantas cuestiones políticamente correctas, en cierta izquierda se colgaron las medallas de la exclusiva, con los otros en la inopia. También hay ecologistas que cobran por serlo, y otros austeros y cargados de bonitas intenciones para salvar el planeta, que rima con Greta.
EN el reparto entre Gibraltar y La Línea de la Concepción, a la colonia británica le ha tocado la parte rica y al municipio fronterizo español la parte pobre. La Línea tiene unos 63.000 habitantes y Gibraltar en torno a 35.000. En el ranking de los municipios con más paro de España (entre los mayores de 40.000 habitantes), La Línea aparece la segunda, con una tasa del 29,50%, que sólo supera Ceuta con el 34,47%. Por el contrario, según las estimaciones, en Gibraltar se puede considerar que hay pleno empleo, con una tasa de paro que estaría en torno al 0,50%, y sería la segunda más baja del mundo, tras la de Catar. Ese contraste tan abrumador no se debe a la casualidad. Depende, en gran medida, de los beneficios fiscales que han conseguido en Gibraltar y también de las peculiaridades linenses.