EN la ciudad de Cádiz cada año hay más perros y menos niños. Eso se refleja en las estadísticas del INE, en las meadas callejeras y en el cierre de…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
LAS obras públicas sevillanas forman parte de la historia interminable, puede que el Apocalipsis llegue antes. Agosto era el gran mes de las obras públicas sevillanas. En agosto, aprovechando las vacaciones y la desbandada a las playas, se ponía la ciudad patas arriba, con levantamientos de calles, tuberías nuevas, cambios…
QUIZÁS hemos cambiado de régimen y no nos hemos enterado. Al parecer, hemos pasado de una democracia parlamentaria a una autocracia presidencialista. O será que Pedro Sánchez, en su madurez, cada vez se parece más a Maduro. El objetivo es el mismo: gobernar, sí o sí, con mayoría o sin…
SEVILLA ha pasado a ser una ciudad anticuada; o desfasada, si se quiere. En un debate que convocaron entre el médico e investigador José López Barneo, que iba de ateo, y el hermano mayor del Gran Poder, Félix Río, que iba de creyente, faltaría más, se reconoció que el atraso de la ciudad no es por culpa de los cofrades. Ni de la Feria tampoco, que conste. A los palcos y a las casetas acuden incluso empresarios muy emergentes. Vamos mejorando, si hasta los ateos lo reconocen. La culpa de que Sevilla esté anticuada es de los políticos. No hay que darle más vueltas.
LA presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, protagonizó ayer unas declaraciones en Canal Sur Radio, en las que vino a decir que este año “me están dando la del pulpo en el Carnaval de Cádiz”. Añadió que se lo toma con humor. Digo yo que ese pulpo no es para tomarlo como el de la ensaladilla del Lulu. El último pulpo famoso fue Paul, que pronosticaba los resultados del fútbol. Pero desde que palmó, no hay otro pulpo que no sea a la gallega, o en ensaladillas de pulpo, que rivalizan con las de gambas y las de atún, aunque esto es más propio de analizar por Pepe Monforte. Hasta que se ha descubierto que este año a Susana Díaz le están dando la del pulpo en el Carnaval. No es por casualidad, sino por lo mismo que se metían tanto con Teófila, y ya no, ¿para qué?
LA buena gente es malísima, en Cádiz peor todavía. Ya están bramando porque han colocado unas figuras del Dios Momo y la Bruja Piti en el balcón del Ayuntamiento. Insinúan que es una alegoría del cambio, que el Dios Momo representa al mismísimo Kichi, que de tal estaría disfrazado, visto que no puede cantar en la final como en otros tiempos. Y que la Bruja Piti es una simulación de Teófila Martínez, a la que no le han puesto los pelos rubios por disimularlo así. O para que no se interprete como algo personal, según se explicó con el agua de Loreto.
CALIFICAR el fallo del jurado del Carnaval como justo o injusto carece de sentido común. Con el actual sistema de puntuaciones no suele haber grandes sorpresas, aunque algunos puestos se deben al azar de un puntito o dos, que es hilar finísimo. Los finalistas del Carnaval de 2017 son previsibles. Si nos preguntan antes de empezar, sólo hay dos infiltrados: la chirigota ‘No te vayas todavía’, del Bizcocho, de San José de la Rinconada, y el coro ‘La reina de la noche’, de los estudiantes que no todos estudian. Se han ganado ese puesto de honor durante el concurso.
ES una retirada a tiempo. Es decir, a tiempo de convertirse en uno de los personajes míticos del Carnaval de Cádiz, sin insistir en el juego sucio de destrozarse los grupos unos a otros, como acostumbran las comparsas en los últimos años. A tiempo de quedarse fuera de las pequeñas miserias, como si una comparsa tiene dos o tres puntos más, o si este cuenta con más amigos en el jurado. Aparte de que Cádiz, con su ausencia, podrá valorar (con Antonio Martín vivo y coleando) el hueco insustituible que se queda, que será el de la esencia de las comparsas, cuando eran reconocibles, sin buscarle los tres pies al gato que maúlla no se sabe por qué.