AL edificio de la Casa de Iberoamérica en Cádiz todavía se le conoce como la Cárcel. Lo mismo pasa con la plaza de toros, los cuarteles y otros edificios que…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
A la gastronomía sevillana la tienen discriminada en las guías, así se encomienden a Dios o al diablo. En la Guía Michelín, Sevilla y su provincia se quedaron entre las peores de Andalucía. Y lo más chocante es que la Guía Repsol ha inventado este año unos soletes de Navidad…
LA Constitución ya ha cumplido 47 años. La Constitución, hasta fechas recientes, era joven, no sólo lo parecía, pero ya ha llegado a una edad en la que debe cuidarse para prevenir antes que curar. Es decir, una edad en la que es adulta y madura, en la que aporta…

EL conflicto de Cataluña forma parte de otro más grave, que es la impotencia de Europa. Estamos volviendo al escenario de hace un siglo, a lo que había antes de la Guerra Civil española (en clave interna) y antes de la II Guerra Mundial (en clave europea). Vivimos en unos tiempos en los que casi todo se reduce a la economía y los intereses, como se ha visto en la cumbre europea de Tallin. Los políticos no entienden que este es un problema ideológico. Han perdido las ideas que inspiraron la Europa democrática. Sólo quedan los restos del naufragio. La sociedad se polariza por el odio de clases. Así engordaron, hace un siglo, a los fascismos (por la extrema derecha) y al comunismo (por la extrema izquierda).
AL Cádiz le salió todo mal y al Lorca todo bien. Así encajaron un 3-0 ante un equipo que sólo había ganado el primer partido de Liga. El resultado se distorsionó en los minutos finales, pero el partido se perdió desde del principio. A ello contribuyeron las bajas de Alvarito y de Barral. En los tres últimos partidos de Liga no ha jugado el veloz extremo y sólo un ratito el temperamental delantero. La consecuencia es que el Cádiz no ha marcado ningún gol y sólo ha sumado un punto (de nueve). Pero lo peor es que se ha visto que algunos relevos aportan poco. Y para colmo, el entrenador Álvaro Cervera tampoco pasa por su mejor momento a la hora de decidir las alineaciones.
APROVECHANDO que mañana tienen un disparate en Cataluña, voy a recordar que uno de los principales monumentos de Cádiz está dedicado a un gaditano cuya familia paterna era de origen catalán: Segismundo Moret y Prendergast. El monumento a Moret es algo más que un monumento. Son conocidos sus vaivenes. Allí se han concentrado los últimos supervivientes de Los Pabellones, con Miguelito y demás, pero también se han visto sentadas poco cuidadosas. El monumento causa asombro a nuestros visitantes. La semana pasada, iba por allí y unas señoritas me preguntaron quién era ese tal Moret. Yo contesté: “Sólo les digo que este señor no se merece que Cádiz le dedique este pedazo de monumento por haber nacido aquí. Si hubiera nacido en Olot, o en Reus, no lo tendría”. Ellas, que eran claramente catalanas, se hicieron un selfie con palo, por llevarse un recuerdo.
ES normal que en Sevilla se viva con pasión la pantomima bananera de la Generalitat catalana, que han disfrazado de referéndum. Después de pisotear los derechos más elementales de los españoles, empezando por la integridad territorial consagrada por la Constitución, se sienten agraviados, y mantienen el desafío con una desfachatez que supera todas las previsiones. Sin embargo, llama la atención que el guirigay independentista cuente con el entusiasmo del alcalde de Marinaleda, Juan Manuel Sánchez Gordillo. Además de colocar la bandera estelada catalana en el Ayuntamiento de esta población sevillana, ha anunciado su presencia en Cataluña. Acude como “observador internacional”.
ENTRE los múltiples despropósitos que se generan en Cádiz, de un tiempo a esta parte, está la polémica por el Voto de la Ciudad a la Patrona. En 2015, el primer año de José María González en la Alcaldía, se negó a participar y le cedió el marrón (según lo ven ellos) al entonces concejal de Fiestas, Adrián Martínez de Pinillos, que acudió muy correctamente vestido, según el protocolo, con un aire personal, como a lo Salvochea. La intervención, en cuanto al contenido, no pasó a la posteridad, ni se recuerda especialmente. Desde entonces, atendiendo a las presiones laicas (por no decir ateas), decidieron no participar. Olvidando que no es una responsabilidad de Podemos, sino de la ciudad de Cádiz a la que él representa.