LAS cofradías de Vísperas ya no son lo que eran en Sevilla. Antes eran las parientes pobres de la Semana Santa, eran como pro-hermandades que hacían méritos para introducirse en la nómina de la Semana Santa, en cuanto detectaran un hueco. Así se engordó la nómina, por cierto. Sin embargo, en 2024, las cofradías de Vísperas merecen una mayor atención, porque se han consolidado y realizan una buena labor. Cada una con sus características, con sus aspiraciones y su identidad particular como hermandad. En general, se debe destacar que han evolucionado a mejor.

TRES días antes del Domingo de Ramos y tres días después del Pregón de la Semana Santa de Juan Miguel Vega. El Papa Francisco recibirá mañana en el Vaticano al presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno Bonilla. Otro político español para su colección. Se suele recordar que el Papa no ha venido todavía a España en viaje oficial, pero raro es el político de este país que no le ha rendido pleitesía en una audiencia. En ese aspecto, destaca la vicepresidenta Yolanda Díaz, que siendo muy de izquierdas y militante del PCE, ya ha peregrinado a Roma en dos ocasiones. La última el pasado 2 de febrero. También fue un detalle fino que el líder del PSC, Salvador Illa, acudió de visita justo cuando se dio a conocer el acuerdo para la Ley de Amnistía.

LA Esperanza de Triana visitará el Polígono Sur en octubre de 2025. Lo anunció el arzobispo de Sevilla, José Ángel Saiz, en la función principal de instituto, que se celebró el domingo de la alegría, coincidiendo con el Cabildo de Toma de Horas. Mientras en la Capilla Real la hermandad trianera formulaba su tradicional disconformidad con el orden de la Madrugada, en Santa Ana el arzobispo proclamaba que en las procesiones extraordinarias de 2025 será un punto destacado la presencia de la Esperanza de Triana en las Tres Mil Viviendas. Allí estará antes de sus cultos extraordinarios en la Catedral, con motivo del LXXV aniversario del dogma de la Asunción.

SON días de pregones abundantes y de rimas sencillas. Así, pues, esto de “Koldo, échame el toldo”, es como lo de “Currito dale al botoncito” de Quitasol, que empezó Antonio Somoza y se popularizó con la narrativa de José Antonio Sánchez Araujo. Hoy en día, para los toldos, se puede cambiar a Leopoldo por Koldo, que tiene nombre de ariete rompedor. Y esto lo digo porque Koldo pudo ser una mina para Sevilla. Si en vez de mascarillas, hubiera vendido toldos, más se hubiera forrado. Hubiera dejado Sevilla a la sombra. Y esto lo digo porque aquí gusta mucho un toldo, pero no siempre se colocan a tiempo. No son como las mascarillas, que se colocaron con rapidez a las buenas amistades.

TAN acostumbrados estamos a que los nuevos proyectos en Sevilla salgan mal que apenas se le presta atención cuando uno va adelante. Es lo que ocurre con el proyecto para la antigua fábrica de tabacos de Altadis y sus terrenos anexos. El 20 de febrero fue firmada la donación de la capilla a la Hermandad de las Cigarreras, gracias a las gestiones realizadas con la empresa KKH Property Investors, que fue la adjudicataria, y que tiene experiencia de remodelaciones en Madrid y Barcelona. Ante notario, firmaron la donación el presidente de la empresa, Josep María Farré, y el hermano mayor de las Cigarreras, José García Pastor, acompañados por el alcalde, José Luis Sanz. Porque no es una cesión, sino una donación. Significa que la hermandad, después de casi 60 años de estancia en esa capilla, por fin posee una sede propia, para arraigar y crecer en Los Remedios. Aunque eso es sólo la parte cofrade. Hay mucho más para la ciudad.