LA globalización nos puede llevar a adoptar los usos y las costumbres de otros países. Es lo que está ocurriendo con las fiestas de Todos los Santos y los Fieles…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
LAS lluvias torrenciales y los vientos provocaron ayer inundaciones y destrozos en Andalucía, sobre todo en las provincias de Sevilla y Huelva. Coincidía la fecha con el aniversario de la dana que causó 229 muertos en Valencia, lo que acentuaba el impacto psicológico. En Sevilla se sabe que las grandes…
A los pocos días de la catástrofe, escribí que Carlos Mazón debía dimitir como presidente de la Generalitat valenciana. Es lo que pensaban (y siguen pensando) la mayoría de los ciudadanos. Ha sido un error mayúsculo que permaneciera en el cargo, con la excusa de que sería el piloto de…

EL Gobierno de la nación considera ricos a todos los que no son totalmente pobres. Y a los que no son votantes del PSOE o de Unidas Podemos los catalogan como fachas, franquistas, enemigos de la democracia, antisociales, ultras y todo lo que se les ocurra. Esas diferencias entre buenos (los suyos) y malos (los demás) hay que tenerlas en cuenta, porque según su modo dualista de percibir el mundo, los malos, los ricos y los fachas nunca van a estar contentos y siempre se van a quejar. Y eso ocurre porque atacan a la clase obrera, suponiendo que haya obreros y clase en el Gobierno. Pero una cosa es la teoría y otra la práctica. La práctica es, por ejemplo, el recibo de la luz y sus circunstancias.
EN la disputa entre el PP y Vox por la reprobación de Santiago Abascal se debe tener en cuenta lo esencial: hace falta prudencia en Ceuta y sobran las fanfarronerías. Ya sabemos que en Madrid algunos líderes centralistas creen erróneamente que toda España es como Madrid, pero no es así. A las pruebas nos podemos remitir: Cataluña, el País Vasco, incluso Galicia y Andalucía, donde ahora gobierna el PP. Como en Madrid, con Isabel Díaz Ayuso, pero en diferentes circunstancias. El presidente de Ceuta es Juan José Vivas, también del PP, que gobierna desde 2001, aunque se encuentra en minoría. Conoce aquello mejor que los políticos de Madrid. La declaración contra Abascal (siendo fea cualquier reprobación ideológica, hasta de líderes de los extremos) desde un punto de vista estratégico era oportuna, porque se pasó de rosca en un enclave de alto riesgo, donde no estaban los ánimos para echar más leña al fuego.
ES un éxito que hayan inaugurado el Museo de Camarón en San Fernando. Como suele pasar con los museos de esta tierra, su puesta en marcha no ha sido fácil. Pero lo abrieron para las visitas, con las restricciones de la pandemia eterna. La apertura debería servir de recordatorio para Cádiz, una ciudad muy culta (leído sea con cierta ironía), donde los museos son vilipendiados, y de ellos se habla mucho y se hace nada o muy poco, por lo que se diluyen en el tiempo. Cádiz es una ciudad con proyectos de museos fantasmagóricos. Por eso, el de Camarón viene a demostrar que todo lo que no se abre al público es un museo inútil, una estratagema o un cuento chino.
LA muerte de Tomás Balbontín ha causado un nuevo desgarrón al periodismo sevillano. En las necrológicas se ha destacado de Tomás que era un periodista de raza, lo que se suele decir de todos los periodistas cuando mueren. En su caso, fue sobre todo combativo, de ideas propias, y fustigador de concejales. Convirtió la información municipal en género periodístico por sí mismo; y como ha indicado Paco Correal, escribía a golpes, yo diría que más Bukowski que Umbral, a arreones, a impulsos. Quizá los mejores artículos son los que uno escribe indignado, porque se va al grano, sin rodeos. Precisamente Sin rodeos era el título de la sección que escribía Nicolás Salas, en sus tiempos de director de ABC de Sevilla. En aquella vieja Redacción de la calle Cardenal Ilundáin, que dirigió Nicolás, el número de bajas sigue en aumento.
EN estos días, cuando se sigue hablando y escribiendo de José María Pemán, a la espera de que se pronuncie el Ayuntamiento sobre la lápida, conviene una referencia a lo que más se debería conocer: su obra escrita. Olvidada, cuando no maltratada, como casi todo lo suyo. Las editoriales no reeditan a Pemán. Por eso, muchos caricaturizan su obra literaria sin haberla leído. En 2006, cuando yo era director de Diario de Cádiz, publicamos ocho libros, que formaban la Biblioteca Pemán. Una antología con edición y selección de Ana Sofía Pérez-Bustamante Mourier, profesora titular de Literatura Española de la Universidad de Cádiz, a la que considero la mejor especialista actual en la obra de Pemán, que estudió con rigor. La Biblioteca Pemán incluía tres libros de memorias, dos de teatro y uno, respectivamente, de poesía, narrativa y artículos.