EN la polémica por los cambios de nombres de las calles, la opinión de los vecinos es importante. Son los afectados. Pues si te cambian el nombre de la calle,…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
AL ministro de Transportes, Óscar Puente, lo tienen ya en el punto de mira la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Sevilla. Es un ministro peculiar, con una parte buena y otra mala. La buena es que suele decir lo que piensa y miente menos que otros compañeros de…
ETA fue fundada en 1959, cometió crímenes durante el franquismo, los siguió perpetrando en la democracia, anunció el cese de su actividad armada en 2011, pero no se disolvió oficialmente hasta 2018. ETA duró casi 60 años; es decir, 20 años más que el franquismo, y de ellos más de…
LOS procedimientos de Carles Puigdemont desde que se fue al presunto exilio de Bruselas son espantosos. Se ha convertido en un auténtico espantapájaros. Ha montado una ficción de presidente telemático que sólo se cree él mismo. Incluso ha creado una web del Gobierno de la República Catalana, una institución falsa e ilegal. La espantada de políticos independentistas catalanes, que anuncian su regreso a la actividad privada, se debe al convencimiento de que ya no hay nada serio que decidir, y que para las cuestiones pendientes con la Justicia es preferible hacer mutis por el foro. Pero esto no solucionará el problema que nos espera en los próximos meses.
EN el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Cádiz ha ocurrido un hecho portentoso. La concejala de Cultura, Eva Tubío, miembra de Ganemos (o sea, de Izquierda Unida) presidió la presentación del pregonero de la Semana Santa, Juan Carlos Torrejón, y del cartel, obra del fotógrafo Jesús Patrón. Y, para que no faltara un detalle, encima tenía el retrato del rey Felipe VI, que pintó Antonio Álvarez del Pino, y que preside dicho salón. A su lado, estaba Álvaro de la Fuente, concejal de Podemos, vestido con traje oscuro y con corbata azul. Este interés municipal por los eventos cofrades no se recordaba desde antes de la Revolución de junio de 2015.
PUEDE ocurrir que esos escarceos de Juan Espadas, Beltrán Pérez y Javier Millán para el presupuesto municipal de 2018 sean sólo la puntita del iceberg de 2019. Los pactos municipales en Sevilla han sido polémicos desde las primeras elecciones democráticas. En 1979 cerraron el primer pacto de izquierda, entre el PSOE, el PSA y el PCA. Un pacto para toda Andalucía, donde los andalucistas cambiaron Sevilla por Granada a los socialistas. Eso creó un gran conflicto territorial para el PSA, pero le dio la Alcaldía sevillana a Luis Uruñuela, que era lo que buscaban. Desde el principio se creó una escuela de la componenda.
COMO estamos en Carnaval, la gente ya no se interesa por la política loca, digo local, sino que habla del tiempo y de la gripe. Apenas se conocen personas gaditanas que no hayan padecido la gripe o un buen catarro en este maldito invierno. En el SAS también andan como locos, con las urgencias colapsadas y tal. La culpa es de la gripe, que casi ha quintuplicado su incidencia, si la comparamos con el año pasado. El invierno anterior había en la provincia 167 casos de gripe por 100.000 habitantes, mientras que este invierno hay 716. La estadística tiene toda la pinta de ser falsa, hay muchos más, pues algunos no acuden al médico, ¿y cómo se enteran en el SAS? Hasta nuestro entrenador, Álvaro Cervera, se pilló la gripe. Esperemos que no se la contagie a la plantilla.
HAY que entenderlo: él no quería fusilarlos, sino que lo dijo “con ironía”. Y no era la Guerra Civil, aunque hubo lucha entre civiles. Los incidentes de Pedrera (entre la comunidad más o menos local y los rumanos) han servido para poner de manifiesto que en una sociedad supuestamente democrática también hay odio y bajas pasiones. En situaciones difíciles, se puede prender la llama del extremismo. Se lo recuerdo a los de la Memoria Histórica, que tanto tergiversan la historia y se olvidan de las circunstancias. Es muy fuerte que te quemen un coche, pero todavía peor es que te fusilen a tu hermano. En la Guerra Civil hubo fusilamientos en ambos bandos. Y en la guerrita de Pedrera, el señor alcalde, Antonio Nogales, de Izquierda Unida, pronunció palabras intolerables.