EL atentado de un yihadista islámico en Algeciras ha causado una profunda conmoción. Es lógico. En el ataque perpetrado en dos iglesias por Yassin Kanjaa falleció el sacristán de la…
LA derrota del Cádiz ante el Sevilla puede parecer engañosa. Al minuto 90 se había llegado con empate. Fue un duelo competido, en el que el Cádiz tuvo aspectos buenos…
EN la partida por la Alcaldía, Antonio Muñoz se ha sacado un as de la manga: la Ley de Capitalidad para Sevilla. Digamos que puede ser una forma de contrarrestar la mala compañía de Pedro Sánchez. El alcalde socialista ha recurrido a una propuesta que defendió el PP (y singularmente…
APENAS faltan cuatro meses para las elecciones municipales. En Andalucía no coincidirán con las autonómicas, como en otras regiones. En Andalucía se consiguió que en las autonómicas sólo se hablara de Andalucía. Aunque, en los análisis, se buscó trascendencia nacional al éxito de Juanma Moreno. El PP presentó ayer en…
ALGUNOS reputados gastrónomos piensan que las estrellas de Michelín son un camelín. Es decir, que están sobrevaloradas, y que se quedan con la gente. Sin embargo, es como una biblia de la gastronomía para ciertos comensales. Así encumbran o despeñan restaurantes, no siempre con criterios ajustados a la realidad. Es cierto que el libro de los gustos culinarios no se puede limitar a una opinión, a veces discutible. En ese sentido, se debe señalar que Sevilla está maltratada en la Guía Michelín. En el cómputo de estrellas de la gastronomía española, Sevilla no sólo aparece por detrás de las principales capitales, sino incluso peor que algunos pueblos.
AUNQUE una parte de los gaditanos no se lo crea, en Cádiz la cultura es mucho más que el Carnaval. O lo debería ser. Sin embargo, en la ciudad no se ha conseguido crear una buena promoción cultural para atraer un turismo específico. A pesar de contar con festivales de primer nivel en varias artes. Un ejemplo lo tenemos estos días, con el XX Festival de Música Española, que empezó el 11 de noviembre y se prolongará hasta el próximo domingo, día 27. Cuenta con una programación musical atractiva para melómanos no sólo de Cádiz, sino también de fuera. Pero no se ha promocionado con el suficiente énfasis, ni se ha convertido en lo que debería ser: un aliciente para el turismo cultural.
ERAMOS pocos (apenas 8.000 millones de seres humanos) y, de repente, parió la abuela Fifa un Mundial en Qatar. Será el más impresentable de la historia. Un ejemplo de cómo funciona el mundo en estos tiempos del calentamiento global. Se mire por donde se mire, todo lo que se encuentra es chungo. Empezando por la designación, para la que sobornaron votos por la cara y no pasó nada. Después llegaron las acusaciones por las muertes de trabajadores en las obras, que carecían de las normas básicas de seguridad. Los difuntos eran parias de la India profunda y Bangla Desh, huidos de Afganistán y gente así. Después llegaron quejas porque la homosexualidad está prohibida en Qatar. Y porque a las mujeres no les preguntan si es sí, o si es no. Y, para rematarlo, los hooligans quieren ir a los mundiales a emborracharse y no pueden.
EN Cádiz lo peor que le puede pasar a un ente viviente es ser humano. Es mucho mejor ser vegetal, animal, cosa o extraterrestre. Esto ha quedado de manifiesto en los últimos tiempos del kichismo. Y la guinda del pastel ha sido el cartel del Carnaval de 2023. El autor, Fabio Castro, escoltado en la presentación por los concejales Paco Cano y Lola Cazalilla, proclamó: “Este éxito se lo dedico a los animales, los árboles y los seres vivos no humanos de Cádiz”. Y se quedó tan pancho, aunque ha servido para el cachondeo. La gente no recuerda que en los coros han salido ‘Los marcianos’ y ‘Los bichitos de luz’, en las comparsas ‘Los gatos callejeros’ o ‘Calabazas’, en las chirigotas las frutas de ‘Ricas y maduras’, o ‘Los encantadores de perros’. Y así podríamos seguir poniendo ejemplos. En el Carnaval ha salido todo, incluso seres humanos, que son los que mayormente cantan.
LA guerra no ha terminado. O eso parece. Han pasado dos semanas desde que los restos mortales de los generales Queipo de Llano y Bohórquez fueron desalojados de la basílica de la Macarena. A los que estuvieron incordiando, durante varios años, para que salieran de allí, y a los que esperaban que se quedaran hasta el juicio final, les parece mentira, pero es verdad. Por consiguiente, la basílica de la Macarena ya no tiene nada que ver con la Ley de Memoria Democrática. La basílica debe ser visitada y considerada únicamente como lo que es: un lugar de culto religioso, donde se venera a la Esperanza, una de las imágenes religiosas de más universal devoción, así como al Señor de la Sentencia, la Virgen del Rosario, etcétera. Merece respeto.